El equipo Tudor Pro Cycling afronta la Milán-San Remo con varias opciones estratégicas en sus filas. A primera vista, la baza más evidente sería Julian Alaphilippe, campeón de la "Classicissima" en 2019 y una referencia en este tipo de carreras. Sin embargo, el ProTeam suizo también cuenta con alternativas interesantes, como el experimentado Matteo Trentin o, quizás, una sorprendente apuesta por el joven neerlandés Rick Pluimers.
¿Por qué confiar en Pluimers? El director del equipo, Bart Leysen, tiene claro que el ciclista de 24 años está en un momento de clara progresión. "Ya lo demostró el año pasado en el Renewi Tour y lo ha continuado en esta temporada. Es muy agudo y se ha obligado a ser un ciclista protegido. Está en una buena curva de crecimiento y espero que dé un paso más este año. Estoy convencido de que habrá otra capa por encima", explicó Leysen en declaraciones a Wieler Revue.
La primera prueba para confirmar estas sensaciones llegará este sábado en la Milán-San Remo, una carrera que puede encajar bien con las características de Pluimers. Leysen confía en las opciones del joven corredor. "En un buen día puede sobrevivir al Poggio con los diez mejores, creo", señaló el director del equipo.
Pluimers ya ha mostrado esta temporada que puede competir al más alto nivel. Su primera gran actuación llegó con la victoria en la Muscat Classic (1.1) en Omán, pero el verdadero golpe de autoridad lo dio en la Kuurne-Bruselas-Kuurne, donde se midió con los mejores y logró un destacado quinto puesto.
Sin embargo, el momento que realmente lo posicionó como una amenaza potencial para la Milán-San Remo fue su rendimiento en la reciente Tirreno-Adriático. En la exigente tercera etapa, que varios favoritos utilizaron como test para La Primavera, Pluimers se mantuvo con los mejores y cruzó la meta en cuarta posición, confirmando su excelente estado de forma.
Las previsiones meteorológicas para el sábado añaden una capa extra de incertidumbre a la carrera. Las condiciones de mal tiempo podrían alterar el desarrollo de la clásica italiana. "Debido al mal tiempo, este año no será una Milán-San Remo normal", advirtió Leysen. "Sospecho que será un caso de no poder estar a la altura de los mejores, pero también podría ser un caso de poder estar a la altura. Eso es aplicable a muchos corredores. Seguro que estará cerca".