Stefan Küng ha revelado que apenas recuerda su terrible caída en el Campeonatos de Europa, en la que se estrelló contra las barreras y se le permitió volver a montar en su bicicleta a pesar de tener la cara ensangrentada y el casco destrozado.
El accidente causó una gran controversia en su momento, y mucha gente criticó al ciclismo suizo y a los organizadores por permitir que el especialista en contrarreloj llegara a la meta en una confusa secuencia de acontecimientos.
"Creo que fue un problema de guía. Durante una contrarreloj estoy básicamente ciego, sólo puedo ver unos metros por delante debido a la posición que tengo que mantener y tengo que confiar en las indicaciones que llegan por radio desde el coche del equipo", dijo Küng a SRF.
La Federación Suiza de Ciclismo se disculpó por el incidente y dijo en su momento que nunca debería haber terminado esa carrera, pero que debido a la rapidez de todo y a que Küng volvió a montar rápidamente una bicicleta nueva, no pudieron evaluar la situación adecuadamente a tiempo.