Mientras muchos en el pelotón parecen haber aceptado el dominio absoluto de
Tadej Pogacar,
Remco Evenepoel se niega a hacerlo. Según los analistas de Het Nieuwsblad, Jan-Pieter De Vlieger y Guy Van den Langenbergh, el belga está estudiando minuciosamente los patrones de carrera del esloveno, intentando comprender y neutralizar el mecanismo detrás de su supremacía.
En el
podcast Café Koers, De Vlieger ofreció una lectura reveladora sobre el enfoque mental del campeón olímpico y vigente campeón del mundo de contrarreloj. “Remco no se enfrenta a la supremacía de Pogacar con frustración, sino con análisis forense”, explicó. “Se nota que está estudiando cómo funcionan realmente sus ataques. Incluso ha comentado que Pogacar no cambia de marcha cuando acelera; simplemente aumenta su cadencia.”
Para De Vlieger, la observación no es trivial. Según el analista, Evenepoel ha identificado el punto exacto donde Pogacar marca la diferencia: esos uno o dos minutos de aceleración explosiva que deciden carreras enteras.
“La evaluación de Evenepoel es que pierde en esos momentos de aceleración, y que después se estabiliza. Sabe que tiene que encontrar una respuesta a ese impulso inicial, ese lapso de uno o dos minutos en el que se abre la brecha. Eso es en lo que está trabajando.”
En otras palabras, mientras buena parte del pelotón intenta resistir la ofensiva del esloveno desde la resignación, Evenepoel analiza científicamente sus derrotas para transformar la frustración en conocimiento. Su método no es emocional, sino empírico: recopilar datos, observar patrones, detectar debilidades.
La determinación del belga por acortar distancias con Pogacar ha sido una de las historias recurrentes de la temporada 2025. Ambos se midieron en repetidas ocasiones a lo largo del año, especialmente en la primavera y el verano, con victorias del esloveno en el Tour de Flandes y Lieja-Bastogne-Lieja, carreras que en otro tiempo habían sido territorio de Evenepoel.
Pero si Pogacar impuso su dominio en los Monumentos, el belga encontró su redención personal más adelante, en los Mundiales de Kigali. Allí, Evenepoel se coronó campeón del mundo de contrarreloj por tercera vez consecutiva, superando a Jay Vine e Ilan van Wilder y, significativamente, alcanzando a Pogacar en plena carretera.
Fue un símbolo poderoso: el alumno alcanzando momentáneamente al maestro, el perseguidor demostrando que aún puede recortar distancias.
Remco Evenepoel y Tadej Pogacar, dos de los mejores ciclistas del mundo
El plan a largo plazo
La exhibición de Kigali confirmó que Evenepoel no sólo sigue siendo una potencia absoluta en el reloj, sino que está evolucionando hacia un ciclista cada vez más completo, con herramientas tácticas y físicas capaces de poner en jaque, algún día, al esloveno.
Mientras Pogacar continúa su reinado arrollador en los Monumentos y las Grandes Vueltas, el entorno de Evenepoel opta por la paciencia. Su fichaje por Red Bull - BORA - hansgrohe para 2026 representa algo más que un simple cambio de equipo: marca el inicio de una nueva fase en su búsqueda.
El conjunto alemán le ha prometido un entorno más adaptado a su evolución como escalador y corredor de resistencia, dos campos donde Pogacar todavía conserva una ventaja considerable. En otras palabras, Red Bull - BORA no ficha a un campeón ya hecho, sino a un proyecto de antagonista a largo plazo del fenómeno Pogacar.
En una temporada en la que muchos rivales parecen haber bajado los brazos frente al dominio del esloveno, De Vlieger y Van den Langenbergh coinciden en que Evenepoel representa una excepción. Es, dicen, “el fuera de serie que aún cree que el dominio de Pogacar puede romperse”.
“No se rinde, ni compite desde la resignación”, señala Van den Langenbergh. “Analiza, ajusta, aprende. Es el único que parece seguir buscando un plan realista para batir al corredor más completo del ciclismo moderno.”
Esa actitud lo distingue en un pelotón cada vez más consciente de que el margen de error frente a Pogacar es mínimo. Mientras otros esperan milagros o errores ajenos, Evenepoel construye metódicamente su respuesta, paso a paso, con la precisión de un relojero.
Queda por ver si esa búsqueda acabará dando resultados tangibles. Pogacar sigue siendo el referente absoluto del ciclismo contemporáneo, una figura que combina talento, resistencia, inteligencia y audacia como pocos en la historia reciente.