La reciente decisión de la UCI de permitir la participación de un equipo más en las Grandes Vueltas ha generado un intenso debate en el mundo del ciclismo. La medida, implementada de manera inmediata, ha provocado reacciones encontradas, especialmente entre quienes critican al organismo rector por ceder ante las presiones de los organizadores. La polémica radica en que esta decisión contradice los constantes debates sobre la seguridad en las carreras.
"Vamos a hacer un poco de historia. En su momento, limitamos la participación a 22 equipos por razones de seguridad, para que no hubiera más de 22 equipos de 8 corredores", recordó Cyrille Guimard en Cyclism'Actu. "Ahora, en un momento en que se habla mucho de caídas repetidas, choques masivos y accidentes graves, pasamos a 23 equipos".
Guimard cuestionó abiertamente la lógica detrás de la medida: "¿Es bueno? ¿No es bueno? Sinceramente, estamos manejando conceptos de seguridad sin fundamento. En conclusión, tomamos decisiones según lo que nos conviene en cada momento. Y en este caso, la cuestión es que, con 22 equipos, un equipo francés podría haber quedado fuera. Políticamente, eso no se vería bien. Así que, como en toda decisión, siempre hay intereses político-económicos en juego. Pero no se trata de seguridad".
El exdirector deportivo también criticó la falta de medidas reales para mejorar la seguridad de los ciclistas. "Son intereses ajenos a la seguridad de la que se habla cada semana. Además, nunca tomamos las decisiones correctas en materia de seguridad y esto no es algo nuevo", afirmó, antes de sugerir una posible solución. "Porque repito, y aunque moleste a muchos, empiecen por quitar los auriculares y verán que habrá menos caídas. Mientras no abordemos el problema de raíz, el próximo año podríamos tener 24 equipos y volver a los 200 corredores en carrera. ¿Por qué no? La decisión ya está tomada y hará feliz a un equipo".
Otra cuestión que surge es si estos ocho corredores adicionales aportarán un beneficio deportivo real. "¿Qué más aportará? No lo sé. Hoy, ¿es lógico tener a Julian Alaphilippe en la salida del Tour cuando su equipo está lejos de estar en los puntos?", se preguntó Guimard. "Además, ¿son los puntos una referencia real cuando se suman durante tres años? ¿Es lógico? No lo creo".
Para el técnico francés, la decisión de la UCI responde a razones políticas y económicas, dejando de lado criterios deportivos y de seguridad. Mientras el debate continúa, la inclusión de un equipo adicional en las Grandes Vueltas ya es una realidad que marcará la próxima temporada.