"Del diez al quince por ciento": Stefan Kung y la clave de la extrema dureza del Mundial de Kigali

Ciclismo
miércoles, 24 septiembre 2025 en 12:00
Stefan Kung
Remco Evenepoel se llevó los titulares el domingo al conquistar su tercer título consecutivo en el Mundial de contrarreloj, superando de manera enfática a Tadej Pogacar en el recorrido de Kigali. Tras la victoria del belga, el suizo Stefan Küng peleó discretamente hasta acabar en la décima posición. Para el ex campeón de Europa y medallista de plata en el Mundial de 2022, fue un resultado que reflejó no solo su estado de forma, sino también las duras condiciones en Ruanda.
"Para ser honesto, no me he sentido muy bien desde hace un tiempo", admitió Küng en una entrevista con Bistrot Vélo. La preparación para el Mundial, explicó, estuvo lejos de ser ideal. "Mi verano fue bastante complicado, y por eso aún siento que estoy un poco por detrás. Es difícil cerrar esa brecha. Tenía la esperanza de que la Vuelta fuera buena para mí, pero como dije: cuando ya estás rezagado, cuesta mucho".
Küng ha sido durante mucho tiempo una referencia en la especialidad, con títulos continentales y podios en su palmarés. Pero esta vez sintió que solo podía exprimir al máximo lo que tenía. "No estaba en mi mejor forma. Di todo de mí para lograr un top 10", señaló. Reflexionando sobre lo que pudo haber sido, agregó: "En un buen día, una medalla hubiera sido posible".
Como muchos corredores, Küng destacó la altitud como un factor decisivo en Kigali. “Definitivamente se nota la altitud aquí en el hotel. Estamos a 1500 metros, y aunque no es demasiado, sí se siente". El reto se intensificó por las condiciones del terreno. "Especialmente cuando tienes que hacer mucho esfuerzo. La calidad del aire aquí tampoco es la mejor. Si fuerzas demasiado, lo notas claramente en el sistema respiratorio", explicó.

Problemas para Kung

Küng no debería sentirse decepcionado, considerando que muchos otros corredores también sufrieron. De hecho, varias casas de apuestas daban como favorito a Tadej Pogacar para la contrarreloj en terreno ondulado, pero incluso el mejor ciclista del mundo tuvo un mal día el domingo.
La carga fisiológica fue muy superior a lo esperado. “No hablamos de un uno, dos o tres por ciento, sino más bien de un diez a quince por ciento menos de lo que normalmente puedo rendir en este tiempo", reveló Küng. Esa brecha entre el rendimiento esperado y el real hizo casi imposible planificar con precisión. “Mi entrenador me había enviado la estrategia de ritmo. Después de mis primeros esfuerzos aquí, dije que había que ajustarla. Estaba tan lejos de mi vatiaje que tuve que correr por sensaciones. Realmente sientes que no avanzas".
aplausos 0visitantes 0
loading

Solo En

Novedades Populares

Últimos Comentarios

Loading