En la que ha podido ser su última gran vuelta,
Thibaut Pinot iluminó la carrera, asegurándose un puesto entre los cinco primeros en la general y ganando la Maglia Azzura al Rey de la Montaña en el
Giro de Italia.
En la 20ª etapa, contrarreloj individual por el Monte Lussari, con una pendiente brutal, Pinot se lució. El líder del
Groupama - FDJ, que terminó 5º en la etapa y ascendió a la 5ª posición de la general, lo dejó todo en la carretera. "Sabía que esta contrarreloj podía venirme bien y estoy en una forma ascendente en esta tercera semana", explicó el francés después de la etapa. "El hecho de decirme a mí mismo que era la última vez en un Giro me empujó aún más a darlo todo. Tenía muchas ganas de buscar este top 5 porque significa mucho para mí".
Antes de la carrera, Pinot restó importancia a sus posibilidades de triunfar en la general. En lugar de eso, el corredor de 32 años quería disfrutar, sin presiones, e intentar divertirse. Casi por accidente, sus impresionantes actuaciones en la escapada en busca de puntos para el Rey de la Montaña y una victoria de etapa lanzaron a Pinot a la lucha por un puesto entre los cinco primeros.
"Sé que en el Giro nunca hay que rendirse y que todo puede decidirse en las últimas etapas. Conseguir además el maillot de mejor escalador mientras se aspira a la clasificación general, no es fácil y es un punto extra de orgullo. Pienso disfrutarlo otras 24 horas", prosigue Pinot. "Siempre he creído en mis capacidades. Me siento aliviado porque he conseguido volver a ese nivel. Estoy orgulloso de mí mismo".