Nathan van Hooydonck rodaba a rueda de un grupo perseguidor en la Paris-Roubaix cuando se enteró de que su compañero y líder del
Jumbo-Visma,
Wout van Aert, había atacado al frente de la carrera. Sin embargo, instantes después llegó por radio otro mensaje más aterrador, que dejó a van Hooydonck con la boca abierta.
"Cuando Wout se marchó con
Mathieu van der Poel, estaba confiado", reveló el corredor de 27 años del Jumbo-Visma tras el final de la carrera. "Luego me enteré un minuto más tarde de que había pinchado, así que es una verdadera lástima. Para mí, esto es mucho más amargo que el Tour de Flandes".
Por supuesto, van Aert terminó 4º en el Tour de Flandes la semana anterior a la
París-Roubaix, pero no tener las piernas es una decepción más fácil de asumir que tener las piernas para ganar pero que se te niegue la oportunidad de mostrarlas debido a la mala suerte, según van Hooydonck. "Si sales a la pista con dos y las pierdes en el sprint, que así sea", explica. "Ahora sales a la pista con dos en la recta principal y luego tienes un pinchazo. No hay nada peor que eso".
A pesar de la decepción, el holandés se muestra optimista sobre el rendimiento del Jumbo-Visma en primavera. "Como equipo hemos tenido una primavera muy buena", aclara. "No ganamos ningún Monumento, que era nuestro objetivo. Pero ganamos muchas grandes clásicas, podemos estar muy orgullosos de ello."