En vísperas de la
Vuelta a España ha quedado claro que no hay un líder fijo en el
Jumbo-Visma.
Primoz Roglic y
Jonas Vingegaard compartirán su liderazgo y será la carretera la que decida qué corredor se convierte en la prioridad del equipo.
"Todos los años, la Vuelta tiene etapas espectaculares", dijo Roglic en un comunicado de prensa. "Suelen contener carreras intensas desde el principio. En esta Vuelta, los ciclistas no suelen esperar hasta la última semana para atacar, lo que la hace más interesante."
Roglic es un gran aficionado a las carreteras españolas, ha ganado tres veces la Vuelta y el año pasado estuvo en liza antes de abandonar en la última semana. Este año su preparación parece ideal y viene de ganar la Vuelta a Burgos, su cuarta victoria de cuatro en carreras por etapas este año;
"Tenemos una selección fuerte. Es demasiado pronto para decir quién será el líder absoluto del equipo. El objetivo es que haya un corredor del Jumbo-Visma en el podio de Madrid", añade Roglic. "La forma y las piernas determinarán quién será el líder en el final de la carrera".