El
Jumbo-Visma se mantuvo al margen en la cuarta etapa del
Giro de Italia en la batalla por la escapada. El equipo vio entonces que el líder Primoz Roglic entraba sin problemas en el grupo de favoritos.
Koen Bouwman ganó el sprint de ese grupo y terminó séptimo.
A Bouwman no le sorprendió que hubiera una larga y dura batalla para unirse a la escapada, según afirma en la página web del equipo. "Si nos parecía bien, se podía ir a luchar por la maglia rosa. Era correr y pararse, porque había entusiasmo por parte de muchos corredores. Fue la típica carrera dura del Giro".
"Y sin embargo, fue un recorrido súper agradable", prosiguió el ganador de una etapa similar en 2022. "Ha sido duro para todos, en realidad toda la etapa. Al final, Sepp y yo seguíamos cerca de Primoz, así que podemos estar satisfechos. Primoz se sentía bien, pero era sobre todo un día para pasar. Demostramos que estamos preparados para lo que venga", se muestra confiado Bouwman.
El director deportivo Marc Reef pronunció unas palabras similares a las de Bouwman. "También llegó la tan esperada batalla por el vuelo del día. Nos mantuvimos al margen, pero nunca se detuvo. Siempre hemos mantenido a Primoz bien delante".