Christophe Laporte ha empezado la temporada a lo grande, terminando tercero en la Omloop Het NIeuwsblad y sexto en la Kuurne - Bruselas - Kuurne. El corredor del
Jumbo-Visma está satisfecho de cómo el equipo afronta las múltiples facetas de ser corredor profesional, y da fe de la felicidad que siente.
"No presto demasiada atención a eso, pero cada vez me siento mejor. Me siento bien. ¿Mejor que el año pasado? Ya lo veremos en las carreras", afirma Laporte en una entrevista concedida a La Provence. "No me hago demasiadas preguntas, sólo quiero ganar las carreras más bonitas. En 2022, gané más bonitas que antes, intentaré continuar".
El año pasado, el francés mostró su mejor forma con el equipo holandés, ayudando a Wout van Aert a conseguir grandes éxitos en las clásicas adoquinadas, al tiempo que ganaba etapas en el Tour de Francia, la París-Niza, la Vuelta a Dinamarca y la Binche-Chimay-Binche. Fue un año sensacional y espera repetirlo en 2023, con la vista puesta en las clásicas adoquinadas.
"Las cosas van muy bien en el equipo. El Jumbo-Visma es muy humano, busca realmente el bienestar del corredor, es profesional en la forma de trabajar, en el material, el entrenamiento, la ambición... No se deja nada al azar, todo está optimizado. Han comprendido que para tener ciclistas que ganen, hay que tener ciclistas felices. Eso me conviene", concluyó.
13º en la Milán-San Remo, Laporte tiene ahora todas sus miras puestas en los adoquines, donde correrá junto a corredores de la talla de Wout van Aert, Dylan van Baarle y Tiesj Benoot en busca del éxito.