El circuito de Wollongong es "perfecto para los atacantes", apunta Tadej Pogacar

Ciclismo
lunes, 19 septiembre 2022 en 14:24
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Este domingo llegará el momento culminante del Mundial de Ciclismo con la prueba en ruta y Tadej Pogacar ha dejado claro que quiere el maillot arcoiris tras no haber podido ganar este año el Tour de Francia.
"Va a ser una carrera muy difícil. Hay varias subidas cortas, pero el recorrido también es técnico debido a numerosas curvas. Eso lo hace idóneo para los atacantes, así que podemos esperar una carrera interesante", dijo el esloveno en una entrevista con Wielerflits. "Tal vez un pequeño grupo pueda marcharse en el final. Eso me beneficiaría".
Tras haber ganado recientemente el GP de Montreal, el corredor de UAE ha demostrado haber recuperado una gran forma. Viajó pronto a Australia y acabó sexo en la contrarreloj individual, en la que Tobias Foss se hizo con la victoria. Sin embargo, quiso dejar claro que su prioridad será la próxima semana.
"Los Campeonatos del Mundo son siempre una competición abierta en la que pueden pasar muchas cosas. Muchos corredores pueden ganar el Mundial. Especialmente este año con este recorrido. No puedes ir a rueda de un corredor. Hay que mantener los ojos abiertos durante todo el día. Después del Tour de Francia, este es mi gran objetivo para el otoño", confirmó.
Aunque ha rendido con regularidad en las carreras de un día, con victorias en Lombardía, Lieja-Bastogne-Lieja y Strade Bianche, nunca se ha colado en el Top10 de un Mundial Élite. "Es cierto que puedo rendir bien en las carreras de un día, pero no es mi territorio natural", continuó. "Lo inesperado me atrae. Siempre hay que apostar. Es el caso del Mundial. Siempre hay que esperar y ver cómo pueden ir las cosas ese día, porque nunca se sabe qué esperar. Pueden pasar muchas cosas. En una carrera por etapas con subidas más largas me desenvuelvo mejor. Pero me gustan las clásicas. Siempre hay que apostar".
También confirma que después viajará a Italia, donde buscará defender su título en el último monumento de la temporada. "Eso me encanta. Tengo muchas ganas de que llegue el Mundial y luego otra vez las clásicas italianas con, por supuesto, Lombardía, que gané el año pasado". Sin embargo, su atención se centra en lo que va a ocurrir esta semana.
"En un Mundial sólo tienes una flecha en el arco. El ataque que hagas debe ser el correcto. En el de 2020 disparé mi pólvora demasiado pronto. Una pena, porque ese día tenía las piernas fuertes...", dijo. Correrá con un equipo esloveno en el que no estarán ni Primoz Roglic ni Matej Mohoric por problemas físicos, lo que le da un estatus de líder absoluto de Eslovenia, pero le priva de algunos apoyos que de otro modo podrían ser cruciales.
"Con los chicos del equipo patrocinador corres todo el año y te conoces a la perfección. Sabes lo que puedes esperar de cada uno. En el equipo nacional no nos conocemos tan bien. Con Eslovenia empezamos con seis corredores. No tenemos un equipo tan fuerte como algunos países que empiezan con ocho hombres, como Bélgica, Holanda, Italia y Francia. Sin embargo, tenemos un equipo fuerte y no creo que eso vaya a ser una desventaja", concluyó.