Wout van Aert regresará al ciclocross el 4 de diciembre en la prueba de la Copa del Mundo de Amberes. El año pasado ganó 9 de 10 carreras y parecía ser la figura dominante en su corta etapa en la disciplina, sin embargo, no está seguro de poder repetirlo este invierno.
"En realidad, me hubiera gustado estar allí en Kortrijk este próximo fin de semana. Pero creo que no estoy preparado para ello a nivel de forma", dijo van Aert en una entrevista con Sporza. "Debido a una enfermedad y a una mayor inactividad, estoy un poco menos avanzado de lo que me gustaría".
Inicialmente tenía previsto debutar en el off-road este próximo fin de semana, y enfrentarse tanto a Tom Pidcock como a Mathieu van der Poel en Hulst, sin embargo ha decidido posponerlo una semana.
"El resfriado no me pareció lo suficientemente grave como para descansar. Entonces empecé a hacer ejercicio y a montar en bicicleta de nuevo, lo que empeoró el resfriado. Al final tuve que tomar antibióticos. Como resultado, empecé mi preparación con un nivel más bajo. En las últimas semanas he podido prepararme bien. Pero es difícil estimar dónde acabaré en el primer cross", admite.
"Por supuesto que espero competir por la victoria lo antes posible, especialmente durante el periodo navideño. Considero que los primeros cruces de esta temporada son un rodaje. Esperemos que el nivel vuelva pronto y pueda trabajar de cara a los Campeonatos del Mundo", compartió el piloto del
Jumbo-Visma. Apunta alto en los Campeonatos del Mundo de Hoogerheide, donde buscará su cuarto maillot arco iris, pero tendrá una dura competencia.
"Es la única carrera en la que me marco un objetivo muy grande", admite. "Pero al final creo que todos los crosses en los que participo son importantes, porque cada cross se siente como una vuelta a casa. El Campeonato del Mundo es la única competición en la que realmente alcanzo el máximo nivel".