Adrie van der Poel fue el blanco de muchas acusaciones durante la semana pasada por el hecho de favorecer a Mathieu al diseñar a su favor el recorrido del Mundial de ciclocross en Hoogerheide. Aunque muchos corredores, incluido el propio Wout van Aert, lo han negado, la antigua leyenda del ciclocross no olvidará lo ocurrido durante este periodo.
"A menudo la prensa belga nos mataba por completo. Puedo decirlo tranquilamente y no heriré a nadie con ello", declaró Adrie a Wielerflits tras el desarrollo del Mundial. "El ciclocross tiene un enorme potencial y trabajo duro para ello. Pongo mi corazón y mi alma en esto. A veces duele bastante cuando ciertas personas empiezan a ordeñar y a lloriquear".
Van der Poel dijo que dejaría de lado el papel de la organización en las grandes carreras de ciclocross tras los acontecimientos de la semana pasada, y señaló a la prensa belga como la principal culpable del enjambre de comentarios negativos. "Afortunadamente, en los dos últimos días recibí mucho apoyo de los corredores, también de los mejores. Y de los mecánicos, por los que realmente tuve que luchar para no dejarles pasar entre la multitud hasta la estación de material", afirma.
Queda por ver si cumplirá su palabra o no, pero a pesar del triunfo de Mathieu van der Poel, sigue siendo una semana desigual para el padre Adrie, que se ha llevado la misma bronca de una parte de los aficionados. "Intento que sea lo más agradable y seguro posible para todos. En retrospectiva, cuando miramos ahora hacia atrás, vemos que hemos trabajado en ello durante mucho tiempo, pero también que ha merecido la pena", concluyó.