Tim Merlier ha conseguido hacerse con la victoria en una edición de la
Scheldeprijs que tenía entre sus participantes a los mejores velocistas del mundo. El corredor del
Soudal Quick-Step se ha impuesto a
Jasper Philipsen y
Dylan Groenewegen en el esprint final.
La clásica llana vio subir a un grupo de cinco corredores en la jornada en el que figuraban Axel Huens, Vincent van Hemelen, Liam Slock, Stijn Appel y Baptiste Planckaert. El grupo nunca amenazó demasiado al pelotón, que controló con facilidad. Soudal Quick-Step, Alpecin-Deceuninck y Jayco-AlUla apretaron el ritmo en el pelotón para favorecer un esprint del pelotón, que no se vio interrumpido por el viento presente en Bélgica.
El último de los supervivientes del grupo delantero fue alcanzado a falta de 7 kilómetros para la meta, y a partir de ahí el esprint del pelotón se hizo inevitable con muchas escapadas ocupando toda la carretera. Fue, como se esperaba, un final muy rápido y peligroso, marcado por varias caídas. En el último kilómetro no hubo una cabeza de carrera definida. Danny van Poppel lanzó su esprint pero sin Sam Welsford al volante.
Tim Merlier se aprovechó de ello y lanzó su esprint muy pronto. Sin Philipsen a rueda, Merlier se hizo con una poderosa victoria, imponiéndose a su principal rival sólo unas semanas después de su derrota en la Clásica Brujas-La Panne.