Primoz Roglic anticipa una gran batalla en la etapa de hoy del Giro de Italia: "Espero que sea una buena lucha, estoy preparado"

Primoz Roglic ha tenido mala suerte en los últimos días, pero consiguió salvar la 6ª etapa del Giro de Italia tras una avería mecánica de última hora. Fue un final tenso en Nápoles, pero el esloveno consiguió mantenerse en los puestos más altos de la clasificación general, y podría subir más esta tarde.

"He pinchado cuando me posicionaba en las zonas delanteras del pelotón. Afortunadamente, pudimos cambiar de bici rápidamente. En parte, gracias al gran trabajo de mis compañeros de equipo volvimos rápidamente al pelotón", dijo un aliviado Roglic al final de la etapa.

La séptima etapa en el Gran Sasso d'Italia consta de 45 kilómetros de ascensión casi constante y será el primer desafío propiamente dicho del Giro. Después de que la etapa 4 al Lago Laceno se disputara de forma conservadora, el final en la cima de gran altitud no permitirá a los corredores rodar tranquilamente, incluso si no hay ataques tempranos.

"Estoy preparado. Muchos corredores han puesto sus miras en esta etapa y espero que sea una buena lucha. Estoy emocionado", asegura. Quinto en la clasificación general y 44 segundos por detrás de Remco Evenepoel, puede que esté pensando en recuperar tiempo, sobre todo porque el belga sufrió dos caídas hace dos días y puede que no esté en su mejor momento.