La etapa inaugural del
Tour de Francia contó con una escapada inusualmente numerosa, en la que se encontraba
Benjamin Thomas. El versátil corredor del Cofidis tenía como objetivo el maillot de lunares y, pese a algunas complicaciones en el camino, logró asegurarse un puesto en el podio de Lille.
"Estoy muy contento, porque eso era justo lo que habíamos planeado en la reunión del equipo. Tenía libertad para meterme en la escapada. Una vez conseguido el primer punto, necesitaba un segundo para asegurarme el maillot de lunares, y todo se reducía a Mont Cassel. Es un lugar que conozco bien porque solemos competir allí durante los 4 Jours de Dunkerque", explicó Thomas tras la carrera.
Sin embargo, el corredor de Cofidis cometió un error: "Ataqué demasiado pronto, Matteo me alcanzó y tuvimos que esprintar. En los adoquines, siempre se esprinta sentado, pero cuando lancé la bici hacia delante, perdí el equilibrio, se me salió la rueda delantera y nos caímos. Ni siquiera sabía si había cruzado primero la línea", cuenta entre risas.
Sin buscar excusas, Thomas reconoce que solo puede culparse a sí mismo por una caída tan ingenua. Por fortuna, ambos pudieron continuar la etapa con apenas algunas magulladuras. "Fue totalmente culpa mía, así que fui a disculparme con él, y por suerte está bien. Yo estoy algo dolorido, y lo estaré durante dos o tres días, pero nada demasiado grave".
Asegurar el primer puesto en la clasificación de la montaña ya representa un pequeño éxito para Cofidis en este Tour. El equipo francés ha traído a algunos de sus mejores corredores, pero no puede aspirar a ganar varias etapas ni a destacar en la clasificación general. Por ello, logros como este se valoran especialmente. Y, por supuesto, es un gran día para Thomas, que espera conservar el maillot el mayor tiempo posible:
"Es mi primer maillot de escalador en cualquier carrera, así que estoy muy contento. Y, por supuesto, el del Tour es legendario. Veremos mañana si vale la pena intentar escaparme, pero me gustaría conservarlo".