Jai Hindley parecía el gran favorito para terminar tercero por detrás de Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar en este Tour de Francia, pero la gran ventaja del australiano ha desaparecido como la nieve bajo el sol tras su caída en la segunda semana, cuyas consecuencias siguen frenando al corredor del BORA - hansgrohe.
"Sigo muy dolido por mis lesiones y el mayor problema es que de momento no puedo acelerar. Hoy he podido rodar a mejor ritmo que otros días, pero sigo sin sentirme yo mismo", lamenta Hindley en un comunicado de prensa del BORA.
Hindley es ahora séptimo, aunque su ventaja sobre el octavo clasificado, Gall, es bastante amplia en estos momentos, mientras que Simon Yates sólo le aventaja en minuto y medio.
"Hoy he intentado aguantar todo lo posible. Llevaba un buen ritmo cuando me he caído, pero la situación es frustrante. No obstante, debemos ser positivos. Ahora tengo dos días para recuperarme más y luego veremos qué puedo hacer el sábado".