ANÁLISIS | La defensa del título de campeón del mundo, ¿podrá completarla Mathieu van der Poel?

Ciclismo
jueves, 26 septiembre 2024 en 15:15
mathieuvanderpoel
El próximo domingo, 29 de septiembre, se pondrá fin al Mundial de Zúrich 2024 con la disputa de la prueba en ruta élite masculina, donde Mathieu van der Poel intentará defender el título que consiguió en 2023 en Glasgow.
Artículo escrito por Fin Major: CyclingUpToDate.
La carrera promete ser un espectáculo de resistencia, táctica y ataques explosivos. A diferencia de la del año pasado, la de este 2024 presenta un tipo diferente de desafío, que puede favorecer más a los escaladores y a los ciclistas polivalentes que a los corredores potentes y explosivos como van der Poel.
En su camino se interponen algunos de los nombres más importantes del deporte. Tadej Pogacar, que ha tenido un extraordinario 2024, ganando tanto el Giro de Italia como el Tour de Francia, está decidido a añadir el maillot arco iris a su ya ilustre carrera. Por su parte, Remco Evenepoel, flamante campeón del mundo de contrarreloj y vencedor olímpico en ruta en 2024, estará ansioso por revalidar el título mundial en ruta que ganó en 2022. Con un recorrido que presenta más de 4.400 metros de desnivel, van der Poel se enfrenta a una verdadera prueba de sus capacidades polivalentes, pero ¿podrá conservar las codiciadas franjas arco iris?

El recorrido: ¿Un patio de recreo para escaladores?

El recorrido de 273,9 km de Zúrich no perdona, con varias subidas largas y duras y descensos rápidos y técnicos que pondrán a prueba a los corredores más experimentados. Es una carrera diseñada para llevar a cada corredor a su límite y, en muchos sentidos, no es un recorrido que se adapte naturalmente a los puntos fuertes de van der Poel. Con más de 4.400 metros de desnivel, la ruta favorece a los escaladores más ligeros y especializados que pueden hacer frente a la implacable ganancia de altitud.
A diferencia del circuito de Glasgow del año pasado, que presentaba numerosos repechos adecuados para el estilo explosivo de van der Poel, en la ruta de Zúrich los corredores tendrán que afrontar subidas más largas y sostenidas.
Es probable que en este tipo de recorrido se produzca una reducción constante del pelotón a medida que cada subida vaya restando energía a las piernas de los que no puedan mantener el ritmo. Los circuitos finales en torno a Zúrich serán especialmente duros, con su combinación de curvas cerradas y largas subidas, que prepararán el terreno para unas últimas horas de carrera dramáticas. Para van der Poel, el reto no consistirá únicamente en gestionar estas subidas, sino en asegurarse de que le quedan reservas para causar un impacto en las etapas finales.
A pesar de las dificultades del recorrido, Mathieu van der Poel ha demostrado una y otra vez que no se le puede descartar. De hecho, su estado de forma de cara al Mundial es prometedor. Su reciente victoria en la primera etapa del Tour de Luxemburgo, por ejemplo, demostró que sigue siendo una fuerza a tener en cuenta. Esa etapa, una carrera de 158 km con cuatro ascensos categorizados y 2.578 metros de desnivel, puede no haber sido tan exigente como el recorrido del Mundial, pero demostró la capacidad de van der Poel para rendir en terrenos difíciles.
Además, su victoria en el Mundial del año pasado en Glasgow se produjo en un recorrido con 3.570 metros de desnivel, no muy diferente al de Zúrich, aunque la naturaleza de las subidas de Glasgow era más favorable al estilo explosivo de van der Poel. Lo que hizo tan notable su victoria de 2023 no fue sólo la forma de su dominio, sino el hecho de que se recuperó de una caída y aún así se las arregló para vencer a su rival más cercano, Wout van Aert, por la friolera de 1 minuto y 37 segundos. Puede que el recorrido de este año no permita el mismo tipo de dominio, pero si alguien puede adaptarse a un nuevo conjunto de retos, ése es van der Poel.
En cuanto a su preparación, van der Poel se ha centrado en perder peso para mejorar su capacidad escaladora, una medida que podría dar sus frutos en las duras subidas de Zúrich. Conocido por su mayor corpulencia en comparación con los escaladores ligeros a los que se enfrentará, la capacidad de van der Poel para controlar su relación peso-potencia en las subidas largas será fundamental.

Físico: ¿Puede el tamaño jugar en su contra?

Con 1,90 m y unos 75 kg, van der Poel es sin duda uno de los corredores más corpulentos del pelotón profesional. Esto le convierte en un ciclista poderoso, capaz de realizar el tipo de esfuerzos explosivos que le hacen ganar carreras como el Tour de Flandes y la Strade Bianche. Sin embargo, en las subidas largas y sostenidas, esa masa extra se convierte en una desventaja en comparación con escaladores más ligeros como Pogačar o Evenepoel, ambos más compactos y hechos para prosperar en ascensos prolongados.
Aunque van der Poel es conocido por superar las subidas más duras, no hay duda de que este recorrido le obligará a ser más conservador que en un recorrido con menos desnivel. Los informes sugieren que ha tomado medidas para perder peso de cara al Mundial, con el objetivo de mejorar su capacidad para competir en las subidas más largas. Pero no está claro si esta estrategia será suficiente para superar su desventaja natural frente a los escaladores más ligeros.

Los Rivales: Pogačar y Evenepoel

Quizá las dos amenazas más peligrosas para la defensa de van der Poel sean Tadej Pogačar y Remco Evenepoel, que han protagonizado dos temporadas sensacionales en 2024.
Pogačar llega al Mundial como el mejor corredor del mundo. Aunque nunca ha ganado el maillot arco iris, el esloveno de 26 años tiene todas las herramientas necesarias para lograrlo: su capacidad escaladora es inigualable y su sentido táctico le permite aprovechar cualquier oportunidad que se le presente. Pogačar tiene fama de lanzar ataques devastadores en solitario, y en un recorrido como el de Zúrich, éste podría ser su momento para conquistar su primer título mundial. Van der Poel tendrá que vigilarle de cerca, sobre todo en las últimas etapas de la carrera, cuando es más probable que Pogačar haga su movimiento.
Remco Evenepoel, que arrasó en la prueba de ruta de los Juegos Olímpicos y acaba de conquistar su segundo título mundial de contrarreloj, es otro corredor del que van der Poel debe cuidarse. La potencia del belga y su capacidad para rodar en cabeza durante largos periodos le convierten en un rival formidable en un recorrido como éste. En 2022, Evenepoel ganó el Mundial de ruta con un ataque en solitario, una táctica que podría intentar repetir en Zúrich. Para van der Poel, mantenerse en contacto con Evenepoel en las subidas más largas será esencial si quiere defender su título.

Conclusión: Una defensa difícil, pero no imposible

Mathieu van der Poel se enfrenta a una ardua batalla, tanto en sentido literal como figurado, para defender su título de campeón del mundo. El recorrido de Zúrich, con sus largas y duras subidas, pondrá a prueba su resistencia como no lo hizo el del año pasado en Glasgow. Sin embargo, la capacidad de van der Poel para estar a la altura de las circunstancias, incluso cuando las probabilidades parecen estar en su contra, le convierte en un corredor con el que nunca se debe contar.
Pogačar, Evenepoel y otros serán rivales formidables, pero la combinación única de potencia, inteligencia táctica y determinación de van der Poel le da una oportunidad de luchar. Si puede mantener el contacto en las subidas más largas y conservar su energía para el esfuerzo final, van der Poel podría sorprendernos a todos y defender su maillot arco iris.