El padre de Mathieu van der Poel "desvela" su fórmula del éxito para ser el mejor del mundo

Desde hace muchos años, nadie considera que haya alguien mejor que Mathieu van der Poel en ciclocross. El neerlandés es el rey de la disciplina. De hecho, está a solo un título mundial de superar el récord de maillots arcoíris, que actualmente comparte con Erik de Vlaeminck (ambos con 7). Y este invierno se sigue esperando un dominio total por parte de la estrella de Alpecin-Deceuninck.

“Si funciona, no lo toques” es una máxima aplicable a muchos ámbitos y, en este caso, encaja a la perfección con Mathieu van der Poel. El neerlandés regresará al ciclocross el 14 de diciembre, si todo transcurre según lo previsto, y seguirá un calendario clásico y conocido hasta el Mundial, que se disputará en Hulst el 1 de febrero de 2026.

“Ya ha vuelto a correr y a pedalear, y en dos semanas podrá añadir entrenamientos intensivos de ciclocross. Construir una buena base en invierno es clave para la próxima primavera”, explicó Adrie van der Poel, su padre y leyenda del ciclismo, a VRT.

Tras cerrar su temporada en carrera en el Renewi Tour a finales de agosto, el ciclista de Alpecin-Deceuninck ha pasado mucho tiempo lejos de la bici para disfrutar del parón y resetear después de otro ciclo larguísimo, de diciembre a agosto, con título mundial de ciclocross, Milán-San Remo, París-Roubaix, etapa y liderato del Tour de Francia incluidos.

Recientemente ha retomado el trabajo serio pensando en 2026 y pronto volverá a la bici de ciclocross para afinar con trabajo específico en la disciplina donde más ha brillado. Este invierno tiene la opción de enfundarse el maillot arcoíris por octava vez, lo que, como se ha mencionado, le convertiría en el rey en solitario del barro.

Su programa se desveló ayer: debut en Namur el 14 de diciembre, casi todo el bloque navideño y, después, las tres últimas mangas de la Copa del Mundo antes del fin de semana del Mundial.

“Si todo va bien, lo puedes rematar del tirón. Si progresa, no se añadirán más carreras”, detalló Adrie. “Pero si las cosas no salen como se espera, se quitarán pruebas. A grandes rasgos, es el mismo programa de los últimos años.”