Wout van Aert ha corrido hoy de forma muy agresiva en la séptima etapa del
Tour de Gran Bretaña. El belga del
Jumbo-Visma atacó varias veces en el final de la etapa, pero no pudo hacer suficiente selección. Al final, el noruego Rasmus Tiller se hizo con la victoria. Sin embargo, Van Aert no está descontento.
Van Aert lanzó un ataque en Crawley Hill, la subida decisiva del día, y se le unieron varios corredores, con los que formó un grupo de cabeza. Desgraciadamente para el corredor de 28 años, este grupo fue remontado. "Por un momento pensé que pintaba bien, pero los perseguidores eran demasiado fuertes. Todavía había muchos gregarios que podían sacrificarse", declaró en el sitio web del Jumbo-Visma.
"Hoy me he sentido bien. Quizá he corrido con demasiado entusiasmo, pero al menos lo he dado todo. Habría estado bien poder recompensar el trabajo del equipo con una victoria", continuó. A falta de cuatro kilómetros, Van Aert volvió a atacar, pero este intento también fracasó a la vista de la meta.
A falta de una jornada, Van Aert se mantiene líder con tres segundos de ventaja sobre un nutrido grupo de corredores. "Estoy contento de seguir en cabeza. Estamos en una buena posición de salida a falta de una etapa, pero aún no ha terminado. Mañana será mejor correr con más cuidado, porque hoy me he quedado aislado rápidamente. Mañana espero un duelo de hombre a hombre. Ganará el más fuerte, esperemos que seamos nosotros", concluyó. El Tour de Gran Bretaña termina mañana con una difícil etapa en cuesta.