Wout Poels estaba teniendo un
Tour de Francia 2024 muy complicado por culpa de una enfermedad que le impidió rendir a su mejor nivel. Sin embargo, en la 17ª etapa, el escalador neerlandés se metió en la escapada y ofreció una buena imagen, cruzando la línea de meta en octava posición, a 2:39 de Richard Carapaz, el ganador del día. Esto le hizo subir ocho puestos en la clasificación general, metiéndose en el Top 50 a 2:27:51 del líder Tadej Pogacar.
La mayor parte de la etapa estuvo marcada por la interminable batalla por la escapada. "Fue una etapa dura, realmente a tope desde el principio", cuenta Poels a
NOS. "No sé exactamente cuántos nos escapamos, pero en ese momento sólo eran cincuenta kilómetros. Fue duro", se expresa con cautela el corredor del
Bahrain Victorious.
El hecho de que Poels estuviera allí puede calificarse de logro en sí mismo. "Todavía me dejaban caer al principio con ese maldito viento. Eso fue un poco peor. Después me recuperé y, como equipo, queríamos estar sobre todo con Jack Haig. Al final me quedé corto en esa subida para estar con ellos. Iban demasiado rápido para mí en la parte inferior. Luego cerré una brecha con algunos corredores delante de mí, pero luego ya se habían ido. Ha sido una lástima. Pero está bien volver a estar en carrera por un día".
Poels sigue en carrera y vuelve a tener buenas sensaciones. En la difícil última semana tendrá suficientes oportunidades. "Todavía quedan algunas etapas bonitas", confirma Poels. "Como la de Isola. Aunque será un poco más difícil", se refiere el de Limburgo a los corredores de la clasificación. "Mañana también puede ser algo, pero es más algo para mi compañero de equipo Matej Mohoric. Al final hay que aprovechar todas las oportunidades, porque los corredores de la clasificación general dejan poco".