Mathieu van der Poel ha marcado las tres últimas primaveras junto a Tadej Pogacar, repartiéndose entre ambos los monumentos más importantes. Sin embargo, a medida que se acerca el final de la temporada 2025, Van der Poel se encuentra con una estructura de apoyo muy distinta de cara a 2026. Una serie de salidas en el mercado de fichajes ha dejado al
Alpecin-Deceuninck con escasez de corredores para las clásicas, y el periodista Thijs Zonneveld considera que la estrella neerlandesa tiene motivos para preocuparse.
La lista de bajas es significativa: Edward Planckaert, Fabio Van den Bossche (rumbo a Soudal - Quick-Step), Gianni Vermeersch (a Red Bull - BORA - hansgrohe), Quinten Hermans y Xandro Meurisse (a Q36.5 Pro Cycling Team). Para un equipo que había confiado en la fuerza numérica para respaldar a Van der Poel en las clásicas, este éxodo supone un duro golpe.
"Parece que existe un problema de desarrollo", señala Zonneveld. "Sólo tienen dieciocho corredores con contrato y, de momento, únicamente ascienden ciclistas del equipo de formación, donde cuentan con algunos talentos realmente buenos".
Entre los promovidos figuran el neerlandés Senna Remijn y los belgas Aaron Dockx y Lennert Belmans. Zonneveld aprecia potencial en la llegada de estos jóvenes. "Son corredores de gran nivel, y también destacan ciclistas de ciclocross como Niels Vandeputte, que además es rápido en carretera".
No obstante, el panorama general revela carencias estructurales difíciles de solucionar. "Tienen un problema financiero porque su copatrocinador se marcha. Van der Poel y
Jasper Philipsen han renovado sus contratos, y eso supone un gran desembolso. Todo el bloque intermedio se va, y será complicado de reemplazar".
Mathieu van der Poel, estrella del ciclismo mundial.
Gregarios para Flandes
Ese bloque, formado por corredores polivalentes capaces de mantener el control en el caos de Flandes o Roubaix, ha sido clave en el crecimiento del equipo. Zonneveld reconoce el acierto de Alpecin-Deceuninck a la hora de identificar y potenciar a ciclistas infravalorados que otros pasaron por alto. "Lo han hecho muy bien en los últimos años. Incorporaron corredores que hacían pensar: ¿vas a controlar el Tour de Flandes o la París-Roubaix con ellos? Y lo consiguieron. Tipos como Timo Kielich, Gianni Vermeersch o Edward Planckaert...".
Y añade: "Creo que otros equipos no estaban interesados en ese momento. Tim Merlier es otro buen ejemplo: no encontraba equipo en ninguna parte. Ellos saben ver en los corredores lo que otros no ven, los hacen progresar y les dan libertad para correr en bloque. Y así han sido capaces de dominar el Tour de Flandes o Roubaix. Pero si yo fuera Van der Poel, estaría algo preocupado".