Para
Sepp Kuss, 2023 fue sin duda una temporada más allá de sus sueños más salvajes. El estadounidense no solo corrió las tres Grandes Vueltas, sino que fue una pieza clave para que el Jumbo-Visma ganara un triplete histórico.
Después de ayudar a
Primoz Roglic a conseguir la primera maglia rosa de su carrera en el Giro de Italia, Kuss fue decisivo en la defensa de
Jonas Vingegaard de su corona del Tour de Francia. Sin embargo, la joya de la corona llegó para él en la
Vuelta a España.
En España, Kuss, un corredor que durante tanto tiempo ha trabajado desinteresadamente al servicio de los demás, tuvo la oportunidad de brillar por sí mismo. Se hizo con el maillot rojo tras una experta escapada, no se amilanó a pesar de los aparentes ataques de sus propios compañeros de equipo, Vingegaard y Roglic, y se aseguró la primera victoria individual en una Gran Vuelta de su carrera.
Ahora, en el día en que se ha ampliado su contrato con el equipo, Kuss ha reflexionado sobre su año en la presentación del
Visma - Lease a Bike. "Después de la Vuelta ha habido mucho tiempo para celebrar", dice con una sonrisa, claramente disfrutando de la vida. "No se trataba sólo de la Vuelta, sino de toda la temporada. Para mí, la Vuelta es muy especial si miras la temporada en su conjunto".