Fue uno de los momentos más dramáticos del
Giro de Italia 2023 y de todo el año.
Primoz Roglic iba camino de dar la vuelta a la clasificación general en la última oportunidad, pero su cadena se cayó en medio de la contrarreloj de montaña. Aunque la historia tuvo un final feliz para el corredor del
Jumbo-Visma, pocos sabía que el aficionado que le ayudó era un antiguo compañero de equipo.
Durante el brutal ascenso al Monte Lussari, Roglic vio cómo se le caía la cadena en un tramo increíblemente empinado. En ese momento ganaba unos 15 de los 26 segundos que tenía que recuperar sobre Geraint Thomas, y perdió unos 15 con los pedales fuera. Parecía que el Giro se iba a decidir en ese momento, pero con el apoyo del público Roglic se hizo con una dominante victoria de etapa que le aupó al liderato de la carrera.
Con la limitación del número de aficionados permitidos en la montaña, las carreteras estaban vacías cuando se produjo el incidente. Un mecánico del equipo llegó rápidamente para empujarle, al igual que un aficionado que corrió montaña abajo. Horas después del final de la etapa se discutió sobre el efecto que el aficionado había tenido en la carrera, y se descubrió que había competido junto al propio Roglic en el pasado.
Se trataba de Mitja Meznar, un saltador de esquí que en el pasado ha saltado junto a Roglic, ya que son compatriotas. Fue un giro de los acontecimientos que condujo a un resultado histórico para Roglic, ya que muchos sostienen que "el círculo está cerrado" tras su desgarro en la contrarreloj de la Planche des Belles Filles de 2020.