RUEDA DE PRENSA | "Sentía que era la más fuerte en las subidas" — Niamh Fisher-Black, sobre el Mundial de Ruanda

Ciclismo
sábado, 13 diciembre 2025 en 15:00
NiamhFisherBlack
Niamh Fisher-Black ha sido una corredora muy activa durante varios años en el pelotón femenino, pero este año ha dado un salto con Lidl-Trek tras ganar independencia y galones tras su salida de Team SD Worx - ProTime. Varios medios, incluido CyclingUpToDate, preguntaron a la kiwi qué ha cambiado en 2025 y qué esperar de 2026.
La neozelandesa se mostró algo nerviosa en la sala de conferencias del hotel del equipo en Dénia, una mezcla entre una personalidad reservada y quizá una fama que ha llegado de forma reciente. Ganadora de etapa en el Giro Donne, a sus 25 años no es nueva en los focos, pero en la próxima temporada es quizá la figura más importante del conjunto alemán.
Este verano firmó un impresionante quinto puesto en el Tour de Francia Femenino, con un rendimiento sobresaliente en las dos últimas etapas de montaña para escalar con fuerza en la general y acabar entre las mejores. También fue Top10 en Strade Bianche Donne, Flèche Wallone, Lieja-Bastoña-Lieja, la Vuelta Femenina y el Tour de Suisse, completando un año de enorme regularidad, en el que aprendió a ejercer como líder.
En septiembre rozó otro gran golpe. En el vibrante Campeonato del Mundo de Kigali, un grupo de atacantes temprano sorprendió a las grandes favoritas. Fisher-Black sintió que en las subidas era la más fuerte del corte, pero explicó por qué cree que Magdeleine Vallieres la superó.
En el Campeonato del Mundo fuiste segunda, en el marco de un ataque inesperado. Las principales favoritas se quedaron atrás. ¿En algún momento imaginaste que ibas a poder llevarte el maillot arcoíris en Ruanda?
Sí, me lo imaginé. De hecho, notaba que era la más fuerte en las subidas. Seguro que lo pensé, estaba bastante confiada, pero hubo alguien más fuerte que yo.
Si sentías que eras la más fuerte subiendo en el grupo, ¿qué falló? ¿Cómo consiguió Vallieres imponerse?
Sí, atacó en el único sitio donde probablemente podía ser mejor que yo, lo cual fue súper… Quiero decir, era lo que debía hacer. Fue más fuerte en los adoquines. Para mí es un terreno duro porque soy una ciclista muy pequeña y ligera. Y simplemente no pude… En ese momento no pude saltar con ella. Ese fue el problema.
Aun así, fue un año de cierto despegue en el Tour de France. También rendiste a gran nivel. ¿Crees que ya puedes mejorarlo este año?
Sí, seguro. Miro atrás y pienso más… Más que en mis resultados, estoy orgullosa de cómo crecí en mi carácter este año y en la confianza que gané como corredora. Si puedo trasladar eso a las próximas carreras, para mí es muy motivador. Así que espero dar otro paso el año que viene.
Recuerdo cuando estuvimos en la zona mixta tras la carrera del Mundial. Volviendo a esa prueba una vez más. Te pregunté si estabas decepcionada o contenta con el resultado. Me dijiste: “No puedo responder realmente”. No sabías qué sentir… No sé si fue la primera pregunta o si aún no estaba allí. Pero ahora, con esa plata, ¿cuál es la sensación? ¿Sabe a victoria o a derrota?
No es una derrota. Sí, siempre hay un pellizco de decepción cuando lo recuerdo. Pero con algo de ese calibre, es normal. Con perspectiva, puedo mirar atrás y pensar que sí… Aquel día en concreto, aunque estaba confiada por mi temporada y mi forma, probablemente no esperaba estar en esa posición. Y casi por eso corrí como corrí. Competí como si no tuviera nada que perder, porque no pensaba que tuviera todas las piezas para, digamos, rematarlo si hubiera sido una carrera “normal” ese día. Así que también puedo mirar atrás y pensar que fue una buena situación en la que estar.
¿Qué cambió este año para que dieses este salto en resultados? Porque, quiero decir, lo veníamos esperando desde hace años, ¿no? Años no es tanto tiempo. Pero este año encajó todo. ¿Qué cambió, además del nombre del equipo?
Sí, tengo que decir que… Es algo que tenía que cambiar un poco desde mi lado. Y supongo que, sí, como decía antes, mi carácter y la confianza en mí misma como ciclista. El margen entre ser una corredora de primer nivel en el pelotón y ser ganadora es muy pequeño. Es cuidar los detalles. Diría que este año maduré un poco. Y encajé el gran cambio de llegar a un equipo nuevo.
Me abrió un poco los ojos a nuevas personalidades y a una nueva confianza del equipo en mí. Y me gusta mucho en quién me han ayudado a convertirme. Me ayudaron a tomar otra perspectiva en carrera y quizá a ponérmelo más fácil, siendo más segura. Creo que también las chicas del equipo han tenido paciencia conmigo. Evidentemente, no llegué como líder natural. En general soy bastante reservada. Así que ha sido salir un poco de mi zona de confort. Ir a las carreras con el equipo diciendo “ok, hoy corremos para Niamh” y tener compañeras muy fuertes a mi lado. También me corresponde a mí asegurarme de estar a la altura de ese rol. Pero sí, estoy orgullosa del paso que he dado este año. Y eso sin mirar solo los resultados.
Suena un poco como que era demasiado fácil quedarse a la sombra en SD Worx de las grandes figuras. ¿Te sentías cómoda con eso?
Sí, quizá se podría decir. Pero al final, ese siguiente paso siempre tenía que salir de mí. Y sí, quizá por eso el cambio fue realmente muy bueno para mí en ese punto de mi carrera. Para empujarme fuera de esa zona de confort.
¿Te sientes ahora más como una líder? ¿Y es algo que disfrutas o hay algo que no te guste o que te haya sorprendido?
Diría que aún podría ser mucho mejor. Todavía me faltan pasos por dar. Pero sí, sin duda. Ahora tengo más confianza en que puedo competir con las mejores y verme ahí. Y eso es una buena sensación. Y lo que puedo hacer es eso. Y la forma de correr y de entrenar también es distinta. Sí.
¿Hubo un momento concreto de la temporada en el que empezaste a sentir esa confianza? ¿O es más bien al mirar atrás a tu año?
Llevó su tiempo, seguro. Creo que sí. Empecé a sentir que llegaba y luego tienes un contratiempo y vuelves a caer en viejos hábitos. Pero ahí es donde el equipo realmente me ayudó. Me acogieron y me dijeron: bueno, veamos qué podemos hacer mejor. Y a partir de ahí seguí mejorando con eso. Y creo que el Tour fue una semana agitada para todas, para todo el equipo. Y estuvo muy bien cómo le dimos la vuelta en los últimos días. Eso me impactó mucho, ver lo que puedes hacer si simplemente corres. El pequeño bloque cambió bastante el año pasado. Y, ya sabes, se fueron varias figuras importantes y fue un año más de transición.
La gente también comenta eso. Venías de un equipo con muchas líderes. ¿Te resultó más fácil encontrar tu sitio? ¿Crees que el estado de transición lo facilitó o quizá lo hizo más difícil por falta de referencias?
Sí y no. No, creo que ha sido difícil en cierto sentido para este equipo este año, porque ha sido muy de transición. La gente olvida fácilmente que esto es un deporte de equipo. Y construir un equipo lleva tiempo. Y sabíamos que quizá eso no lo íbamos a tener de inmediato. Y sí, pero a la vez, como dices, fue refrescante entrar en un equipo sin una jerarquía preestablecida ni “esta persona es la líder”. Realmente pudimos descubrirlo entre nosotras y encontrar ese equilibrio. Sí, creo que eso, de algún modo, hizo más fácil mi transición al equipo. Bueno, no tengo con qué compararlo, pero para mí fue un cambio muy positivo.
¿Crees que el próximo año también será de transición? Porque ahora, con Lizzie [Deignan] retirada, quizá esa fase de cambios continúe un poco más, otro año o así.
Sí, seguro. Habrá otro gran cambio el próximo año sin Ellen [van Dijk] y sin Lizzie. Eran dos pilares fuertes del equipo. Pero estoy bastante segura de que tenemos ciclistas de mucha calidad para cubrir ese hueco el próximo año. Y para asegurarnos de que seguimos manteniendo esa cohesión de equipo. Y las nuevas también, ya puedo decir que encajan muy bien. Así que creo que esto solo va a ir a más. No es que vayamos a volver al principio. Es un proceso de ir a más y más.
¿Y esperas volver al Tour el próximo año? Y si es así, ¿qué te parece el recorrido?
Sí, espero volver al Tour. Aún no sé exactamente mi plan. Pero por lo que he visto del recorrido, me ilusiona mucho. Y está el reto añadido de la contrarreloj. Pero es una oportunidad para desarrollarme un poco más y ver qué puedo hacer. Veremos cómo encaja con los objetivos del equipo. Pero sí, por supuesto me encantaría estar allí. Es una carrera magnífica.
¿Todavía no hay conversaciones sobre todo el programa de carreras?
Un poco, sobre todo del inicio de temporada. Pero sí, de hecho creo que mañana me sentaré a ver las carreras. Eso sí. No empezaré en Down Under. Este año arrancaré un poco más tarde. Quizá UAE o algo así.
Obviamente tenías una impresión del equipo antes de venir. ¿Hubo algo a lo largo del año que te sorprendiera? ¿Qué fue lo más sorprendente de tu primer año en el equipo? Porque imagino que desde fuera ya tenías una idea, y al entrar, ¿qué te llamó la atención?
Sí, diría que fue muy diferente a mi anterior equipo. Es un grupo y una organización mucho más grandes. Y el nivel de profesionalidad del equipo es, creo, lo mejor que se puede tener. A veces pensaba que no me merecía todo el apoyo que recibo aquí. Y eso ha sido lo más grande este año. Al principio me puse mucha presión, pensando “madre mía, tengo que devolverle esto al equipo”. Pero me di cuenta de que estamos todas en lo mismo. Y no ayuda a nadie que me ponga esa presión. Por supuesto que quiero devolverle al equipo en algún momento, porque lo que hacen por nosotras es increíble.
Hablabas de la falta de confianza. ¿Quién te ayudó a darte cuenta de que lo mereces? ¿Quién en el equipo te ayudó a crecer en esa confianza? ¿Una persona, los directores deportivos?
No puedo decir una sola persona. Los directores deportivos, seguro, son los más cercanos. Pero también, tanto como ellos, mis compañeras y las ciclistas. Al final son a quienes más miro. Porque también son quienes me inspiran. Y creo que son ciclistas muy fuertes por derecho propio. Así que, si ellas creen que puedo hacer algo y lo ven en carrera, eso es lo que más significa para mí.
Seguro que te lo han preguntado mucho. Hablé con tu hermano (Finn Fisher-Black, ed.) en la Tour de Pologne. Dijo que le inspiró mucho verte por televisión. ¿Cuánto habláis de lo que pasa? ¿Es un flujo constante de conversaciones o solo cada tres meses? ¿Cómo os organizáis como profesionales?
Creo que mi hermano y yo somos bastante cercanos en ese sentido. La realidad es que el deporte de alto rendimiento no es fácil. Hay altibajos y ambos lo sabemos ya. Y ambos vivimos en el extranjero. Así que él es mi principal referencia para pedir consejo. Y espero que él diga lo mismo. En realidad, quizá todavía más al revés. Confío mucho en lo que dice mi hermano. Especialmente para cualquier consejo de ciclismo. De hecho, la mayoría de las cosas se las consulto. Así que es una suerte tenerlo.
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