Aunque
Robert Gesink y
Primoz Roglic ya no trabajen el uno junto al otro en el
Visma - Lease a Bike tras el fichaje del segundo por el
BORA - hansgrohe en la última temporada baja, está claro que sigue existiendo un inmenso respeto entre los compañeros de equipo.
Una de las razones del movimiento de Roglic a BORA es el objetivo del esloveno de volver a competir por el maillot amarillo en el
Tour de Francia 2024. Aunque la mayoría del Visma espera sin duda que Roglic decepcione y Jonas Vingegaard vuelva a ganar, Gesink admite que una parte de él animará a su antiguo compañero de equipo.
"Primoz Roglic lo ha ganado casi todo en su carrera de carreras por etapas, excepto ese gran premio que es el Tour de Francia. Con su motivación, es lógico que quiera hacer todo lo posible durante otros dos años para ganar el premio principal", dice Gesink en la revista RIDE. "Si dejo hablar al entusiasta del ciclismo que hay en mí, espero de verdad que consiga este objetivo. Qué historia tan maravillosa sería si, después de todos estos años, con tantas victorias importantes, añadiera ahora ese maillot amarillo que le falta a su lista de éxitos".
"Primoz es uno de los cuatro corredores que son garantía de éxito en la clasificación de las Grandes Vueltas. A nuestro equipo le habría gustado conservar a dos de esos corredores, y por eso, en caso de fusión con Soudal Quick-Step, también estaban ilusionados con la posible llegada de Remco Evenepoel", prosigue Gesink. "No ocurrió. Y sí, sigue habiendo un bloque fuerte que está en buena sintonía. El hecho de que el equipo puede ganar una Gran Vuelta incluso sin Primoz quedó demostrado en el Tour de la temporada pasada".