Óscar Sevilla y
Miguel Ángel López, que actualmente disputan la
Vuelta a San Juan, tienen muchas similitudes.
López fue despedido del Astana la pasada temporada, y tuvo que buscarse un nuevo refugio, el Medellín-EPM. Algo parecido ocurrió con Sevilla cuando estaba en su mejor momento. "Espero que para él sea diferente a lo que fue para mí, espero que le traten mejor y le comprendan mejor y que pueda quitarse esto de encima", dijo Sevilla.
Y añadió: "No he hablado de ello con él, pero Miguel Ángel es joven, sólo tiene 28 años, y tiene una larga carrera por delante, así que espero que no sea nada. Espero que pueda resolver sus problemas y volver a correr en las carreras más importantes".
A pesar de no estar directamente implicado en una investigación por tráfico de drogas, su asociación con el doctor Marcos Maynar, que está en el centro de la investigación, le granjeó una mala reputación y ningún equipo profesional quiso arriesgarse con él. "Miguel Ángel está en el limbo, que es también lo que nos pasó a nosotros. No es algo formal: no ha sido suspendido ni por un juez ni por la UCI ni por nadie, así que es bastante complicado. Esperemos que en este caso se pueda resolver", concluyó Sevilla.