"Nunca había hecho 55 km/h de media en una contrarreloj": Jonas Vingegaard, contento tras perder 10 segundos con Almeida

No es habitual escuchar a Jonas Vingegaard hablar con satisfacción de sí mismo después de una etapa, pero en la 18ª jornada de la Vuelta a España 2025, incluso tras perder diez segundos con João Almeida en la contrarreloj acortada de Valladolid, el danés del Team Visma - Lease a Bike dejó claro que estaba tranquilo y conforme con su rendimiento.

El recorrido, que en un principio debía ser de 27,2 kilómetros, fue reducido por motivos logísticos a tan solo 12,2 kilómetros, un trazado llano y explosivo que favorecía en gran medida a los corredores más potentes y especialistas en esfuerzos cortos.

En ese terreno, Filippo Ganna cumplió con los pronósticos y ofreció una actuación dominante, imponiéndose con claridad y logrando una nueva victoria para INEOS Grenadiers. Frente a un escenario tan poco propicio para sus características, Vingegaard se defendió de forma notable, demostrando que podía estar a la altura incluso en un terreno que no le beneficia.

El propio corredor lo resumió con una sonrisa: “Nunca había hecho 55 km/h de media en una contrarreloj, así que creo que puedo estar contento con mi actuación de hoy. En una contrarreloj llana como esta, se adaptaba un poco más a los chicos más grandes, así que hacerlo así de bien en una crono así es bueno para mí”.

Vingegaard detuvo el cronómetro en 13 minutos y 18 segundos, quedando a solo 18 segundos de Ganna, y cediendo únicamente diez segundos frente a Almeida, que firmó un brillante 13:08 y se consolidó como su inmediato perseguidor en la clasificación general.

La diferencia entre ambos queda ahora en 40 segundos, todavía un colchón importante, pero algo más ajustado de lo que el ex campeón del Tour de Francia hubiera preferido a estas alturas de la carrera. El danés fue realista en su análisis: “Creo que tengo que estar satisfecho con las diferencias, porque he hecho una buena contrarreloj. Sigo en cabeza a falta de dos etapas, así que ahora tenemos que centrarnos en mañana y pasado mañana”.

Aunque no logró luchar por la victoria de etapa, la prestación de Vingegaard fue una de las más destacadas entre los grandes aspirantes a la clasificación general. En un formato que históricamente suele favorecer a corredores más pesados y explosivos, el líder de la carrera supo limitar las pérdidas y mantenerse sólido, consciente de que había dado un paso más en su lucha por la victoria final.

“Fue un día decente para mí. Este tipo de crono cortas y llanas no suelen ser mis favoritas. Así que, en general, estoy bastante confiado”, añadió en su valoración.

El gran beneficiado del día fue João Almeida, que con su regularidad y potencia volvió a confirmar que es un rival peligroso, recortando diez segundos a su gran adversario y reduciendo la diferencia en la general. Sin embargo, la confianza de Vingegaard permanece intacta.

El danés sabe que, en el terreno de la alta montaña, todavía cuenta con su mejor arma y que las dos jornadas que restan, ambas con finales exigentes en ascensión, serán decisivas. “Tenemos que mantener la concentración. Serán dos días duros, pero estoy preparado”, concluyó con serenidad y determinación.