Matteo Jorgenson califica a Matthew Brennan de ‘prodigio’: “Tardé 3 días en asimilar lo que me impresionó”

Con 20 años, Matthew Brennan es uno de los diamantes de Team Visma | Lease a Bike y en 2025 dio el salto al WorldTour para medirse de inmediato con los grandes. Una docena de victorias profesionales, varias de nivel WorldTour con apenas 19 años, no está al alcance de cualquiera, y el estadounidense Matteo Jorgenson cree que compite junto a un talento único.

“Es increíble. Es una locura. Es la definición de un ‘wonderkid’. Sinceramente, creo que es Matthew Brennan. Para mí, su versatilidad es lo que más impresiona”, afirmó Jorgenson a Domestique.

Brennan se hizo profesional este año tras su paso por el filial del equipo neerlandés, y rozó su primera victoria ya en su debut en el Tour Down Under, donde solo le batió al esprint Sam Welsford. Pero al regresar a Europa encadenó triunfos, y en la Volta a Catalunya sacudió el pelotón en la jornada inaugural, lanzando y luego rematando el esprint cuesta arriba en Sant Feliu de Guíxols ante nada menos que Kaden Groves, mientras cazaba a Tibor del Grosso.

“La victoria que logró en Catalunya, nunca había visto nada igual en mi vida”, admite Jorgenson. “Recuerdo estar viendo la carrera, con la boca abierta, en directo. Me costó tres días superar lo impresionado que me dejó ese triunfo”. Luego volvió a ganar, y más tarde en el Tour de Romandía, y entre otros éxitos de 2025 llegaron un triunfo en el Tour de Pologne e incluso su primera general en el Tour of Norway, donde terminó las cuatro etapas entre los dos primeros.

“Tiene un cambio de ritmo brutal con el que puede ganar en casi cualquier situación. Si supera un par de cotas y esprinta desde un grupo de menos de cien, muchas veces es casi victoria asegurada”. También triunfó en la Deutschland Tour y en el Tour of Britain a final de temporada, mostrando capacidad para rendir todo el año, e incluso recibiendo lanzamientos de Wout van Aert en Alemania.

Su versatilidad implica que no necesita necesariamente un lanzador para rendir, como explica Jorgenson, que le conoce de cerca. “A menudo ni siquiera necesita un lead-out. Recuerdo ver Roubaix: se colocó él mismo casi toda la carrera y se metió en el tren de Alpecin con Van der Poel. Me impresionó cómo se hace sitio y se impone”.

El futuro pinta brillante para el británico y Jorgenson, que seguirá en Visma al menos hasta 2027, no tiene dudas de que pronto estará entre los mejores del mundo. “Tiene un talento descomunal y solo espero que el equipo pueda retenerle, porque me encantaría ser su compañero durante mucho tiempo”.