El equipo
Jumbo-Visma superó la séptima etapa de la
Vuelta a España sin demasiados problemas. El recorrido de 201 kilómetros terminó, como se esperaba, en un sprint del pelotón, que ganó Geoffrey Soupe. Sepp Kuss, que se vio retrasado por una caída en el final, conserva su segundo puesto en la clasificación.
En el sprint intermedio, situado a 34 kilómetros de la meta, Jonas Vingegaard entró con éxito en la batalla por los segundos de bonificación. Esprintó hasta el tercer puesto y se llevó dos segundos para la clasificación general. En la que ascendió al décimo puesto.
Según el director deportivo
Marc Reef, el equipo Jumbo-Visma superó bien la jornada. "Ha sido una etapa muy tranquila, pero precisamente en esas etapas suelen producirse caídas en la parte final. Sepp estuvo allí a ocho kilómetros de la meta, pero afortunadamente pudo continuar rápidamente. Nuestros líderes Vingegaard y Primoz Roglic llegaron sanos y salvos y eso es lo más importante. Misión cumplida y a por mañana. Nos espera un día duro".