Pocos pensaban que el legado de
Eddy Merckx llegaría a verse realmente amenazado en el mundo del ciclismo. Sin embargo, en los últimos años ha emergido la figura de
Tadej Pogacar, cuyas asombrosas actuaciones lo han convertido en uno de los mejores ciclistas de todos los tiempos.
La más reciente de estas demostraciones de brillantez, al momento de escribir estas líneas, fue su arrolladora victoria en la Flecha Valona. Pogacar dejó atrás a todos sus rivales en la subida final al Mur de Huy, con un ataque fulminante que le permitió imponerse con una ventaja de 10 segundos, algo casi inédito cuando el pelotón encara agrupado la última ascensión. “La forma en que se despegó de los demás en el Mur de Huy... Increíble. Parecía que el resto estuviera parado”, recuerda el legendario Merckx, tres veces vencedor de la Flecha Valona, en declaraciones recogidas por HLN.
“Fue realmente impresionante. Sin duda, es el mejor corredor del momento, y también el más completo”, continúa el belga de 79 años. “En las clásicas todavía encuentra algo de resistencia, pero en las carreras por etapas, apenas tiene rival. Tal vez solo Jonas Vingegaard o Remco Evenepoel. Está compitiendo en otro nivel”.
Como ya se ha mencionado, las actuaciones de Pogacar en los últimos años han dado pie a numerosas comparaciones con Merckx, algo con lo que el propio ‘Caníbal’ parece estar de acuerdo. “Sí, es el que más me recuerda a mí mismo. Pero comparar generaciones siempre es complicado”, reflexiona el cinco veces ganador del Tour de Francia. “El ciclismo actual es muy distinto al de antes: el equipamiento, la preparación… También hay una gran diferencia entre Pogacar y Evenepoel, por un lado, y el resto del pelotón, por otro”.
Como es evidente, Merckx también es un gran admirador de Evenepoel. La leyenda belga se muestra muy impresionada por el arranque de temporada 2025 de su compatriota. “No esperaba que ya estuviera en tan buena forma”, comenta Merckx, en referencia a la grave lesión que Evenepoel sufrió tras chocar con una furgoneta de BPost durante un entrenamiento rutinario a principios de diciembre. “Me sorprendió en la Brabantse Pijl, pero aún más en la Amstel Gold Race, que tiene 250 kilómetros. Ha hecho un trabajo increíble hasta ahora”.
También para el propio Merckx las cosas van mejor últimamente, una buena noticia tras sus problemas de salud y la espantosa caída que sufrió el año pasado. “Incluso he vuelto a montar en bicicleta”, dice sonriendo. “El mes pasado no podía hacer nada. Las dos últimas semanas he tenido que permanecer completamente tumbado por problemas de circulación. El ciclismo sigue siendo mi vida… Todavía disfruto saliendo a rodar, a mi manera. No diría que estoy nervioso, pero sí con ganas de volver a subirme a la bici en cuanto mejore el tiempo”.