"La carrera más dura de mi vida": Paul Seixas termina 13º del Mundial con 19 años recién cumplidos

El debut de Paul Seixas en la prueba de ruta del Mundial de Ciclismo de élite masculino 2025 en Kigali fue una jornada que dejó huella. El joven francés, apenas en su primera participación en un escenario de tal magnitud, logró un meritorio puesto 13, cruzando la meta a 9 minutos y 7 segundos del vencedor indiscutible del día, el esloveno Tadej Pogacar.

Aunque no consiguió colarse en el anhelado top 10, su rendimiento se interpretó como una auténtica carrera revelación: terminó 40 segundos por delante de su compatriota Pavel Sivakov, el designado líder del equipo galo, consolidándose como el francés mejor clasificado en Kigali.

Visiblemente exhausto tras el esfuerzo, Seixas compartió sus primeras impresiones con Eurosport: “Estoy realmente feliz de haber terminado. Quería ayudar al equipo tanto como fuera posible, especialmente a Pavel, que era nuestro líder. Al final, quizás no tuvo el día que esperaba, y se decidió en los pedales. No logramos un top 10 o mejor, pero ganamos mucha experiencia. Fue muy duro al final, cuando no te queda nada, todo está en la cabeza. Estoy muy contento de haber terminado, y servirá como experiencia de aprendizaje para el futuro.”

El recorrido africano no dio tregua en ningún momento. Para Seixas, la carrera estuvo marcada por las subidas incansables, los sectores adoquinados que castigaban sin piedad y el ritmo abrasador que los mejores del mundo imprimieron desde los primeros giros. Aun así, el francés mostró temple y madurez, consiguiendo mantenerse a rueda de figuras consagradas como Tom Pidcock y Primoz Roglic, incluso cuando la prueba se fragmentaba en mil pedazos en los circuitos alrededor de Kigali.

El propio Seixas reconoció la sensación surrealista de codearse con nombres tan grandes en un Mundial: “Todavía se siente extraño correr con chicos como Pidcock o Roglic, especialmente mientras trato de terminar entre los 10 mejores en un Campeonato Mundial para élites. Es impresionante, y di todo lo que tenía solo para resistir y terminar. No llegué al top 10, pero no estoy compitiendo contra corredores desconocidos, así que no tengo arrepentimientos. Alcancé un nivel de sufrimiento que he raramente experimentado, probablemente la carrera más dura de mi vida. Creo que me ayudará a dar el siguiente paso hacia adelante.”

Aunque no hubo podio ni top 10, la actuación de Seixas brilló con luz propia. Su capacidad para soportar las exigencias extremas del recorrido, para apoyar a su líder de equipo sin dejar de buscar su propio rendimiento, y para finalizar por delante de corredores establecidos en el pelotón internacional, subraya no solo su resistencia física, sino también una madurez táctica impropia de su edad.