A medida que pasa el tiempo, el regreso de Jonas Vingegaard al Tour de Francia está más claro. En un principio, el plan podría ser otro, pero la ruta revelada ha confirmado al danés en camino hacia una defensa del título, algo de lo que se está hablando en la actual concentración del Jumbo-Visma.
"Quiero volver al Tour. Me parece muy especial empezar con el número 1 a la espalda", dijo Vingegaard en una entrevista con Wielerflits y RIDE Magazine. "He visto que el Giro de Italia tiene suficientes kilómetros contrarreloj que me convienen, pero no he mirado ese recorrido de otra manera".
Aunque Vingegaard ha prosperado este año en la contrarreloj, también lo ha hecho en la montaña. Prácticamente, ambos recorridos le verían como gran candidato, pero el danés tiene los ojos puestos en un segundo maillot amarillo.
"Parece que será otra carrera dura. Cuando vi el recorrido por primera vez, mi primera sensación fue que se trataba de un Tour de Francia más adecuado para Tadej Pogačar", dijo. En relación con años anteriores, el recorrido es mucho más adecuado para los escaladores puros, a diferencia de Vingegaard y Pogacar. Mikel Landa, Jai Hindley, Richard Carapaz y Simon Yates son claros ejemplos de corredores que tendrán muchas más posibilidades de triunfar el año que viene, lo que promete una mayor batalla en la montaña.
"La primera observación me dejó claro que hay poca alta montaña de verdad en este Tour. Mi primera sensación fue que hay pocas subidas en la carrera que me convengan. Pero cuanto más detenidamente estudio este Tour, más llego a la conclusión de que ciertas etapas me van muy bien."
Vingegaard liderará al equipo holandés en otra persecución de los maillots amarillo y verde, ya que formará equipo con Wout van Aert. La presencia de Primoz Roglic dependerá de cómo evolucione su salud y su estado de forma en los primeros meses de la temporada.
El Tour sólo contará con 22 kilómetros de contrarreloj individual y será una jornada propicia para los escaladores. Esa es una gran diferencia con respecto al recorrido habitual, sin embargo, Vingegaard ha notado otra diferencia: "Hay una diferencia con la última edición, cuando había una serie de subidas de unos tres kilómetros. El año que viene no estarán en el recorrido".
"Ahora hay más subidas de unos diez kilómetros, que son todas bastante difíciles". En la última edición, Peyragudes y, por ejemplo, La Planche des Belles Filles eran algo más cortas, de unos siete kilómetros. Cuanto más miro el recorrido, más descubro que el Tour 2023 me va muy bien", concluyó el danés.