Los Otxoa son dos hermanos gemelos que corrieron juntos en el prestigioso conjunto español
Kelme. Nacidos el 30 de agosto de 1974 en Berango, un municipio situado en Vizcaya, en el País Vasco, eran dos prometedores escaladores del pelotón.
Javier Otxoa llegó incluso a ganar la primera gran etapa de alta montaña en el Tour de Francia 2000, en Hautacam, por delante de Lance Armstrong. En esa edición terminó 13º en la general y segundo en la clasificación de la montaña, únicamente por detrás del colombiano Santiago Botero, también compañero de equipo.
Sin embargo, el 15 de febrero de 2001 les cambió la vida para siempre. Mientras se encontraban entrenando por las carreteras de Cártama, en Málaga, fueron fatalmente atropellados.
Ricardo Otxoa no pudo sobrevivir y su hermano Javier quedó con una parálisis cerebral de por vida.
A partir de ese momento, el Circuito de Getxo pasó a ir acompañado de "Memorial Ricardo Otxoa" en el nombre. Además, Javier Otxoa quedó como director de honor de la prueba. Pero no es lo único que ha hecho tras el fallecimiento de su hermano y su propia condición.
Javier pasó a convertirse en un deportista paralímpico. Su nueva vida le permitió tener una carrera deportiva exitosa, igual más que la que imaginó años antes. En los Juegos Paralímpicos de Atenas 2004, hizo el doblete en contrarreloj CP3, como ha hecho en París 2024 Remco Evenepoel. También brillaba en la pista, donde se hizo con la medalla de plata en la prueba de persecución individual.
En Pekín 2008, sumó un oro más en contrarreloj, defendiendo con éxito su título de la anterior edición, y un segundo puesto en ruta, para un total de 4 medallas paralímpicas. Javier Otxoa falleció tristemente el 24 de agosto de 2018 en Alhaurín de la Torre, Málaga, después de un tiempo luchando contra una larga enfermedad.