Demi Vollering empezó la temporada con resultados de honor pero ninguna victoria, al contrario de lo que nos tiene acostumbrados. 6ª en la Omloop Het Nieuwsblad, 3ª en la Strade Bianche, 8ª en el Tour de Flandes, 2ª en la Flecha Brabanzona, 2ª en la Flecha Valona y 3ª en la Lieja-Bastoña-Lieja. Pero llegó a España y todo cambió. Dos victorias de etapa y la clasificación general final en La Vuelta Femenina, la Itzulia con un triunfo y la Vuelta a Burgos con otros dos más.
La comentarista neerlandesa Roxane Knetemann, redactora invitada de WielerRevue, analizó la pobre primavera de la campeona nacional: "Vollering insinuó una vez en una entrevista que le gustaría que alguien corriera por ella. Pero la cuestión es que Vollering tiene que aprender a correr un poco más tácticamente. Lotte Kopecky sabe manejar las situaciones de excedente como la mejor" dijo Knetemann sobre las clásicas de esta primavera, en las que Vollering salió con las manos vacías.
En ese sentido,
el inminente traspaso de Vollering al FDJ - SUEZ no es sorprendente. "Si quieres un equipo que corra completamente para ti, Demi debería irse sin más. Es una corredora muy buena que prefiere que la dejen en un punto determinado. Kopecky suele asegurarse de que ella ya ha atacado, para que luego Vollering tenga que mantener las piernas quietas".
Con Marlen Reusser y la rápida Lorena Wiebes, el SD Worx - Protime tuvo naturalmente muchas opciones en muchas carreras. "Todas son ganadoras con cierto ego y comportamiento chulesco. No es nada malo para el ciclismo que una de las tres abandone el equipo", opina Knetemann.
Hasta el Mundial de Glasgow del año pasado, en el que Kopecky se hizo con el maillot arco iris por delante de Vollering, existía un cierto sentimiento de cooperación en el grupo. "El recorrido de Glasgow se adaptaba mucho mejor a Kopecky. Pero incluso allí Vollering cometió muchos errores a nivel táctico. Ese es su talón de Aquiles. Creo que Vollering tiene complejo de Calimero. Yo soy pequeña, ellas son grandes", piensa Knetemann.