El
INEOS Grenadiers asumió la responsabilidad en el final de la 4ª etapa de
Giro de Italia, en la que se ascendió el Colle Molella.
Geraint Thomas está ansioso por descubrir su verdadera forma en el primer final en alto de la presente Gran Vuelta, en el Gran Sasso d'Italia, donde también podría cambiar su papel en el equipo.
"Va a ser un día largo el viernes. Las subidas no son muy duras, pero será la primera gran prueba. Hasta ahora nos sentimos bien y queremos seguir por ese camino", dijo Thomas. El ciclista del INEOS empieza el día en la sexta posición de la clasificación general, 58 segundos por detrás de Remco Evenepoel, después de haber evitado pérdidas de tiempo en las últimas etapas.
El galés tuvo un final tenso la pasada tarde al sufrir una avería mecánica cerca de la línea de meta, pero con el apoyo de su equipo recuperó la posición en el pelotón. Sólo aventaja en cuatro segundos a Tao Geoghegan Hart en la clasificación general, aunque a juzgar por los últimos resultados cabría esperar que el orden cambiara.
Tanto Remco Evenepoel como Primoz Roglic se han mostrado conservadores de cara al final de la jornada, por lo que los demás equipos tendrán que apretar el acelerador si les interesa, o quizás pasar al ataque en la larguísima ascensión final. En cualquier caso, los duros kilómetros finales en altitud serán muy complicados y, aunque pequeñas, se espera que se creen algunas diferencias.