Italia no ha logrado ganar uno de los Monumentos del ciclismo desde 2021, cuando Sonny Colbrelli cruzó la línea de meta en la París-Roubaix, cubierto de barro y con los brazos en alto, desatando lágrimas de felicidad.
El país ha tenido un 2022 sin un solo ciclista italiano entre los diez primeros en estas prestigiosas carreras de un día. No obstante, el 2023 ha mostrado un destello de esperanza con dos segundos puestos obtenidos por Filippo Ganna y
Andrea Bagioli en Milán-Sanremo eIl Lombardía, respectivamente. A estos resultados se suman el décimo puesto de Matteo Trentin en el Tour de Flandes (después de contribuir a la victoria de Tadej Pogacar) y el sexto puesto de un ciclista del Ineos-Grenadiers en la París-Roubaix.
Aunque para muchos, Ganna se presenta como la principal promesa italiana para estas carreras,
Filippo Pozzato, en una entrevista con GCN, ha mencionado otros dos nombres de ciclistas italianos que podrían devolverle a Italia la gloria de ganar un Monumento el próximo año:
"¿Quién puede hacer que Italia vuelva a ganar un Monumento?
Jonathan Milan o Andrea Bagioli. Para mí, Milan podría ganar tanto la Milán-San Remo como la París-Roubaix. Este año Jonathan era mi favorito para la clásica de primavera, pero una semana antes de la carrera cayó enfermo. Creo que su fichaje por el Lidl-Trek puede ser beneficioso para él. Me cae muy bien, es una persona con los pies en la tierra y muy inteligente. Le he visto realizar sprints extraordinarios, y además, es muy joven. En mi opinión, puede cosechar muchos éxitos en los próximos años."
Después de una destacada actuación al final de la temporada, que incluyó una victoria en la Gran Piemonte, un segundo puesto en la Lombardía y un tercero en la Coppa Bernocchi, Bagioli, ganador de la Milano-Sanremo en 2006, está listo para desempeñar un papel importante en las clásicas:
"No me sorprendió ver a Bagioli en el podio de la Lombardía. Estaba seguro de que estaría entre los cinco primeros. Sabía que estaba haciendo un gran trabajo porque había hablado con su entrenador la semana anterior. Además, tiene un futuro brillante por delante."
En los últimos años, Italia ha tenido dificultades para destacar en las grandes carreras como solía hacerlo. Para Pozzato, la razón es sencilla:
"El nivel no es bueno porque ya no tenemos equipos sólidos. Por ejemplo, en Vicenza teníamos una unión de 120 ciclistas, ahora solo tenemos 20. Con tan pocos, es imposible obtener calidad. Por otro lado, otras naciones que antes tenían menos presencia están consolidándose en el ciclismo. Por ejemplo, Gran Bretaña tenía solo dos ciclistas y ahora tiene uno de los mejores equipos del mundo. Australia tenía un ciclista y ahora tiene un equipo WorldTour. Los estadounidenses tenían pocos y ahora también tienen un equipo. Todo se está globalizando, lo que brinda más oportunidades para otros países, pero menos para Italia."