El
Giro de Italia 2025 comenzó este viernes con una etapa inaugural muy emocionante. Para Movistar, fue un día sobresaliente, con resultados muy destacados que ilusionan de cara a lo que se avecina en esta Corsa Rosa.
El equipo telefónico llegó al Giro con una alineación novedosa. El bloque
Einer Rubio - Nairo Quintana en la lucha por la general es intocable para
Movistar Team, pero incluyeron a nombres como
Orluis Aular, Jefferson Cepeda y Jon Barrenetxea, en lugar de Fernando Gaviria, para ir a por todo tipo de victorias de etapa.
Y, como se ha dicho, en la primera etapa ha salido todo prácticamente perfecto. El conjunto español logró un impresionante 3º puesto de Aular en el esprint final, quedando solo por detrás de dos titanes como Mads Pedersen y Wout van Aert.
Pero lo más destacado de Movistar no fue el resultado en sí, si no la forma en la que corrieron durante toda la jornada. El equipo telefónico estuvo siempre atento al frente del pelotón cuando se neutralizó la fuga en la primera de las subidas a Surrel.
Lidl-Trek se encargó de endurecer el ritmo en ambas ascensiones, lo que provocó que muchos ciclistas se quedasen, tanto esprinters como hombres de la general (Thymen Arensman o Derek Gee). Por eso, que Einer Rubio pudiese llegar a salvo a meta con un buen rendimiento en el doble paso por Surrel fue un gran triunfo para todo el equipo.
Orluis Aular eleva la ilusión
Sobre el resultado de Aular, el kilómetro final que hizo el venezolano fue fantástico. Cuando se lanzó el esprint, el ciclista de Movistar Team estaba a rueda de Mads Pedersen, lo que le permitió tener la referencia y ventaja necesarias para estar a punto de hacerse con la victoria.
Evidentemente, contra el propio Pedersen y Wout van Aert, dos de las grandes estrellas del pelotón, es muy difícil ganar. Por eso, esa 3ª posición y los 95 puntos UCI con los que fue recompensado supieron casi como una victoria.