Wout van Aert ha dejado el
Tour de Francia en un movimiento que no llega totalmente de la nada. Su mujer, Sarah, está embarazada y se espera que la mujer del corredor del
Jumbo-Visma dé a luz en cualquier momento.
"Ayer, Wout fue llevado desde el autobús casi sin llamar la atención hasta el helicóptero con la familia Van Eerd, de nuestro principal patrocinador, Jumbo. Le llevó a un avión privado con el que voló a casa. No ha vuelto a ir al hotel", explica el director deportivo del equipo, Arthur van Dongen, a Het Nieuwsblad. "Ya se veía venir desde el día de descanso".
El hecho de que Jonas Vingegaard se haya asegurado aparentemente la victoria en la general del Tour de Francia es sin duda de ayuda, aunque el Jumbo-Visma subraya que habrían permitido a van Aert marcharse cuando quisiera sin importar la situación en la general.
"El lunes nos informaron de que ya empezaba a haber gente en casa y a partir de ahí lo seguimos de cerca día a día. Ese lunes por la tarde se lo comunicó a los corredores", prosigue van Dongen. "Algunos de ellos también tienen hijos, así que respondieron con mucha comprensión. No fue una verdadera sorpresa, porque sabíamos de antemano que era una posibilidad. Puede que haya ocurrido con menos frecuencia en el pasado, pero creemos que la persona que está detrás del ciclista es importante".
"Es un gran corredor de equipo", añadió
Richard Plugge en Eurosport. "Salió ayer. Era una carrera importante para el equipo y él la estaba esperando. Eso demuestra lo gran persona que es".