Tadej Pogacar se ha complicado su triunfo en la general del Criterium de Dauphiné tras una contrarreloj más que discreta. En meta se dejó 49 segundos con Remco Evenepoel y 28 con Jonas Vingegaard.
El esloveno reconoció tras la crono que su estrategia no había sido la adecuada, de ahí su pobre resultado:
"Hoy no hice una contrarreloj perfecta. Creo que probablemente me equivoqué un poco con el ritmo. Empecé la primera sección con demasiada cautela y debería haberme esforzado un poco más".
Eso sí, tiene claro que en estos momentos simplemente lo que está haciendo es poniéndose a tono para el Tour de Francia y que no hay que magnificar lo que ocurra durante esta semana a la que, por otro lado, le queda mucha tela por cortar:
"Está bien, por eso estamos aquí, para ponernos a punto antes del Tour y mejorar. Todavía quedan tres etapas importantes por delante y tengo muchas ganas. El equipo está trabajando bien y, con los rivales que tenemos aquí, es el mejor lugar para ponernos a prueba".