Boy Van Poppel, sobre su papel de mentor de Arne Marit: "Fue un gran honor cuando me dijo que me necesita para hacerle un velocista de primera"

Durante este invierno, Aike Visbeek, entrenador del Intermarché - Wanty, probablemente ha considerado que cada nube tiene su lado positivo al apostar por dos velocistas para las etapas con sprint masivo del 2024. Si bien hemos presenciado el ascenso de Gerben Thijssen al pináculo del sprint mundial, ahora es el momento de que Arne Marit brille. Todo esto bajo la tutela del experimentado líder neerlandés, Boy Van Poppel.

Thijssen y Van Poppel formaban una pareja bien avenida desde el año pasado, por lo que la decisión de separarlos no fue aceptada de inmediato. "Gerben no estaba muy de acuerdo y yo tampoco", explica el neerlandés a WielerFlits sobre su reacción inicial. "Lo discutimos largo y tendido con Aike. Sin embargo, él se mantuvo en su postura, a pesar de que hicimos todo lo posible por cambiarlo. Pero Aike es el jefe. En un momento dado dijo: 'Ahora necesito a Boy para que Arne también sea un velocista de élite'. Para mí fue un gran honor oír eso".

En última instancia, Thijssen también comprendió esa elección. "Aprendí mucho de Boy", dice. "Gracias a él, ahora sé mejor cómo montar finales, cómo mantener la calma y tener confianza en mí mismo. A tener confianza en su salida, o en dónde me dejaba caer. Boy tiene mucha experiencia y es un profesional de los pies a la cabeza. Explica muy bien por qué hay que venir por la derecha o por la izquierda. Nueve de cada diez veces se produjo el sprint del pelotón, como Boy me dijo antes de la salida".

Por lo tanto, se podría ver a Van Poppel en Intermarché - Wanty como el cerebro de los sprints. "Las cosas siempre resultan diferentes de lo que uno piensa. La clave del éxito para Arne radicará pronto en estar preparado para cada escenario. Intento que esto sea transparente para cada oportunidad de sprint. Quiero que mi rematador sepa lo que le espera. Que Arne no tenga que pensar ni cometer errores, sino que pueda actuar de inmediato".

"Arne tiene mucho potencial. Es muy entusiasta y quiere ganar. Pero a veces, cuando quieres ganar, quieres ganar demasiado. Por eso cometes errores. Puedes imponerte con suerte y pura fuerza, pero eso no es garantía de éxito duradero. El primer punto de trabajo para nuestro tren es asegurarnos de que Arne comience el sprint del pelotón en una buena posición sin preocupaciones y pueda continuarlo bien hasta la meta. Sólo entonces podremos empezar a pensar en victorias".