Biniam Girmay y sus objetivos de 2023: "Quiero correr el Tour de Flandes y el Tour de Francia"

Biniam Girmay ha completado una gran campaña en 2022 y en 2023 apuntará aún más alto. El eritreo, que se está recuperando de una larga temporada en la carretera, tiene sobre la mesa una mayor participación en las clásicas de adoquines y su debut en el Tour de Francia.

"Es algo muy especial. No sólo para mí, sino para mi país y para el ciclismo africano", dijo Girmay en una entrevista con Ciclismo Internacional. "Para mi país, la etapa del Giro era más importante, ya que es una carrera mucho más conocida en Eritrea. Pero, para mí y para el equipo, la Gent-Wevelgem fue mucho más bonita, ya que fue mi primera gran victoria".

Girmay espera tener efectivamente la influencia que está teniendo en el ciclismo, y utilizarla para el bien, concretamente en el desarrollo del ciclismo en África oriental y en las regiones ciclistas menos desarrolladas. "Eso espero. No sólo quiero inspirar a los niños africanos, sino que espero convencer a los equipos de que añadan ciclistas africanos a sus plantillas, tenemos mucho talento", continuó.

Con muy poca experiencia o antecedentes en las clásicas belgas, Girmay sorprendió al conseguir un 5º puesto en la E3 Saxo Bank Classic de este año, corriendo junto a algunos de los mejores ciclistas de clásicas del mundo. Ganar la clásica de Gent-Wevelgem días después confirmó su talento. Girmay sólo tiene 22 años y apunta a grandes cotas.

En 2023, espera mejorar aún más sus resultados: "Espero participar en el Tour de Flandes y en el Tour de Francia, sería un sueño hecho realidad. Tras mi descubrimiento de las clásicas flamencas, mi objetivo es prepararlas mejor entrenando en vueltas de una semana. Necesito adaptarme mejor al frío y a la lluvia, no estoy acostumbrado a correr en esas circunstancias. En la contrarreloj estoy mejorando, pero todavía tengo que acostumbrarme más", dijo. 

Girmay es por ahora un sprinter y un clasicómano, ha demostrado una tremenda habilidad para la escalada en las subidas puntuales y se ha convertido en un corredor muy versátil. "Sí, está claro que será más difícil. Es bueno ver que mi respeto en el pelotón ha crecido, pero lo malo es que me vigilarán más", concluyó.