No existía nada parecido al
Tour de Francia Femenino en la época de
Jan Ullrich. Mirando atrás, el alemán probablemente coincidiría en que es una lástima. Sin embargo, eso hace que las carreras actuales resulten aún más disfrutables. En cuanto a la edición de 2025, ganada por Pauline Ferrand-Prévot, Ullrich solo tuvo superlativos para describirla.
"Se ofrece un deporte de altísimo nivel y el ambiente es extraordinario", afirmó el ganador del Tour de 1997 en su pódcast Ulle & Rick.
"Siento un respeto absoluto por los logros de las corredoras. Sacrifican todo su tiempo libre y pasan largas estancias en concentraciones en altitud. Luego compiten en etapas con una velocidad media de 45 km/h, sin viento de cola. Atacan desde el kilómetro 0. Es increíble", dijo Ullrich, destacando el estilo ofensivo de la prueba.
La edición de este año fue "muy emocionante, muy exigente y cada vez más dura hacia el final". Pauline Ferrand-Prévot fue, además, una merecida vencedora. "Fue la corredora más fuerte, especialmente en las subidas de las dos últimas etapas. Evidentemente, fue una fiesta para Francia; la Gran Nación lo celebró, y con razón", señaló el exciclista de 51 años.
Su compañero de pódcast, Rick Zabel, que presenció dos etapas, elogió "el gran concepto de que las mujeres compitan justo después de los hombres".
En su opinión, el ambiente de la carrera ha sido absolutamente electrizante. "El Tour femenino es un evento sensacional, a los aficionados les encanta. Ya no hay mucha diferencia entre el Tour masculino y el femenino", comentó Zabel.
Lo que hace aún más atractivo el evento femenino, añadió, es que "las chicas están bastante relajadas, mientras que los hombres están muy centrados en lo suyo. En el caso de ellos, todo está acordonado en la zona de meta, mientras que en el Tour femenino puedes acercarte directamente a los autobuses de los equipos, y las corredoras charlan y están de muy buen humor".