La temporada de ciclocross se prepara para las primeras pruebas de la Copas del Mundo y varios corredores ya han viajado a Estados Unidos. Ayer se celebró la segunda jornada de ciclocross en Rochester y las condiciones de humedad dificultaron mucho el movimiento de los corredores en algunos tramos del recorrido.
La carrera femenina Elite fue ganada por
Annemarie Worst con una cómoda ventaja, sin embargo la carrera estuvo más marcada por un banco empinado que causó graves problemas a las corredoras. A los siete minutos de la carrera, en la primera vuelta, la extrema pendiente y el barro resbaladizo provocaron una especie de "atasco" en la subida, ya que algunas ciclistas no podían moverse, lo que provocó una situación muy inusual.