Wout van Aert no es ajeno a la mala suerte ni a los problemas mecánicos inoportunos. Ha sufrido varios durante la Paris-Roubaix, pero ninguno tan doloroso como el de Carrefour de l'Arbre, donde atacó hacia una posible victoria, y luego vio cómo sus posibilidades se desvanecían dolorosamente en cuestión de segundos.
"Ya he pinchado varias veces, pero a estas alturas de la carrera es un sentimiento muy agrio. De momento, el 'Infierno del Norte' seguirá maldito para mí. Creo que pierdo 20 o 25 segundos con ese cambio de ruedas. Eso no se puede compensar con Mathieu en plena forma", declaró van Aert a Sporza. El
Jumbo-Visma fue víctima de varios pinchazos a lo largo del día. El propio Van Aert abrió la ofensiva ante Arenberg, pero poco después el equipo empezó a sufrir.
Christophe Laporte estaba en el pequeño grupo que atacó en ese momento, pero pinchó en esos adoquines dejando a van Aert aislado en un grupo en el que había tres corredores del Alpecin. Respondió a los ataques de van der Poel a lo largo de la tarde y guardó sus balas para Carrefour de l'Arbre. La carrera dio un vuelco para muchos en ese sector final de cinco salidas, cuando John Degenkolb se cayó.
Van Aert atacó poco después y consiguió un hueco, pero fue recuperado por Mathieu van der Poel. Después empezó a perder ruedas y se hizo evidente que algo no iba bien. Justo después del sector se detuvo y tuvo que sustituir un neumático pinchado, lo que le costó la posibilidad de hacerse por fin con la victoria que esperaba esta primavera. "Hoy he podido aguantar el dolor y no me ha molestado demasiado durante la carrera. Ahora empieza a dolerme", admite.
"Pero he estado bien y estoy contento de terminar la primavera con una buena actuación", prosigue. Está claro que Van Aert tuvo un gran día. Volvió a subirse a la moto para unirse a los supervivientes del grupo perseguidor, y atacó lejos de todos menos de Jasper Philipsen. Mientras el compañero de equipo de van der Poel esprintó hasta la segunda posición, Van Aert cerró el podio. Una actuación impresionante, pero que no le reportó el resultado que esperaba.
"Estoy orgulloso de lo que he conseguido esta primavera. He hecho una buena serie, pero la gran victoria no ha llegado. Pero en la vida no todo son victorias. He demostrado lo que tengo en mi marcha. Espero que los aficionados hayan podido disfrutar de ello", concluyó.