Egan Bernal es el hombre fuerte de Colombia en el
Mundial de Kigali. Llega con la moral por las nubes tras su triunfo de etapa en la pasada Vuelta a España y espera poder luchar por las medallas en una carrera en la que seguro tendrá oportunidades.
Antes de la prueba, en declaraciones a Eurosport, reconocía sus ganas de conseguir algo en su primer Campeonato del Mundo: "Me encuentro bien, contento, emocionado, con ganas de hacerlo bien".
Sobre las características del trazado, dejó claro que las condiciones van a ser distintas a las que normalmente se viven en las carreras europeas que dominan el calendario: "Es diferente, va a ser un Mundial diferente, duro por la altura y por el aire que está muy cargado".
Ha sido históricamente un ciclista de grandes vueltas por lo que no ha sido habitual ni en clásicas ni en campeonatos del mundo. Pese a todo, espera que su inteligencia en carrera le pueda hacer ser competitivo ante los Pogacar, Evenepoel y compañía:
"Me gusta, estoy emocionado, es mi primer Mundial, las carreras de un día no es que se me den mal, es que nunca me han llamado la atención y ahora en estos momentos estando acá vamos a intentar hacer bien este Mundial, intentar ser lo más profundo que pueda y seguir los instintos".
Preguntado sobre si se sentía uno de los favoritos para luchar por las medallas, dejaba claro su objetivo y lo que le ha llevado hasta tierras africanas para disputar el primer Mundial de su vida: "No sé si soy favorito, sólo sé que voy a intentar dar lo mejor de mí para mi país".
Curioso que en una carrera ya tan larga el bueno de Bernal no hubiera corrido hasta ahora ningún Mundial, aunque es cierto que es el primero que es realmente duro como para afrontarlo con alguna esperanza de conseguir una presea para Colombia.