Tadej Pogacar intentará este año ganar el
Giro de Italia y el
Tour de Francia, algo que nadie ha hecho desde Marco Pantani en 1998. El esloveno afronta una temporada que puede ser histórica para él y para su equipo.
"Ha cambiado un poco desde que llegó al equipo, pero sólo de la forma en que cambian los veinteañeros con el paso de los años. La gente madura", explica a Cyclingnews Joseba Elguezabal, masajista. "Esencialmente, es el mismo chico de siempre: la misma persona a la que le gustan sus bromas, a la que le gusta su comida y le encanta montar en bici, que es muy simpático y que tiene una sonrisa para todo el mundo. Es el número uno sobre la bici y también fuera de ella".
Respaldando las palabras de J
oxeán Fernández Matxin, Elguezabal está de acuerdo en que dentro del equipo se hace mucho hincapié en proporcionar el mismo apoyo y orientación a todos los pilotos y no sólo a unos pocos, lo que en general ayuda a que el rendimiento general del equipo crezca y sea constante a lo largo del año y de las diferentes carreras.
"Igualmente, no veo ninguna diferencia entre el trato que recibe él y el que reciben el resto de los pilotos. En el campo de entrenamiento, por ejemplo, cuando estamos todos en el mismo hotel, nadie recibe un trato mejor o peor. La cuestión es que todos remamos en la misma dirección, y desde el corredor número 1 hasta el número 30 del
UAE Team Emirates, todos reciben un buen trato". Sin embargo, el masajista cuenta que, incluso masajeando a Pogacar, entiende la diferencia frente a otros pilotos profesionales habituales.
"Los grupos musculares de un escalador, un velocista, un ciclista de clásicas o un corredor por etapas difieren entre sí de forma sutil. Pero Tadej es tan excepcional que cuando se trata de un masaje, incluso sus músculos son de su propia clase", bromea. Todos los soigneurs del equipo de los EAU dan masajes a los diferentes corredores cuando estamos en el campo de entrenamiento, y todos han notado lo mismo en Tadej".
"Le estaba dando un masaje después de Vallter en la Volta a Catalunya, una etapa en la que atacó bajo la lluvia y ganó en solitario, y en apenas un minuto volvió a la normalidad. Fue asombroso";