"Tadej es uno de los mayores deportistas que he visto, y Remco no está muy detrás": Ben Healy, bronce en el Mundial

El ciclista irlandés Ben Healy ha puesto el broche de oro a una campaña sobresaliente con un rendimiento estelar en el Mundial de 2025 en Kigali, donde se alzó con la medalla de bronce tras los intocables Tadej Pogacar y Remco Evenepoel.

Para Healy, que ya había dejado huella en el Tour de Francia con una victoria de etapa y un período vistiendo el codiciado maillot amarillo, el logro en Ruanda es algo más que un resultado: es la confirmación de un año de ensueño y el fruto de meses de trabajo incesante.

“Esta temporada no ha dejado de volverse más loca,” comentó entre sonrisas en su entrevista con Cycling Pro Net. “Desde la victoria de etapa y la camiseta amarilla en el Tour hasta ahora estar en el podio de los Mundiales, es difícil de comparar. Pero estar allí con Remco y Tadej, es simplemente increíble.”

La prueba de ruta masculina en la capital ruandesa fue un examen despiadado de resistencia y concentración. Largas subidas, descensos técnicos y sectores adoquinados castigaron sin piedad a un pelotón que se vio obligado a exprimirse hasta el último gramo de energía.

En ese escenario, Pogacar eligió el momento perfecto: lanzó un ataque lejano en Mont Kigali, dejó atrás con facilidad a la mayoría de los perseguidores y rodó en solitario hacia una victoria dominante que reforzó aún más su leyenda.

Detrás, Evenepoel protagonizó una exhibición de resiliencia, sobreponiéndose a tres cambios de bicicleta y otros contratiempos mecánicos antes de asegurar la medalla de plata con su potencia característica.

Healy, mientras tanto, supo mantenerse en la persecución, rodando con inteligencia y permaneciendo en el grupo de cabeza para, finalmente, asegurarse el tercer escalón del podio.

El rendimiento del irlandés no fue solamente una demostración de fuerza física, sino también de lucidez táctica. En cada ascenso y en cada tramo adoquinado, administró con precisión sus esfuerzos, evitando sobrecargarse demasiado pronto y reservando la energía necesaria para los momentos decisivos.

Él mismo explicó parte de su éxito: “El recorrido es muy específico, con subidas lentas y empinadas y clima caliente. Mi traje de velocidad fue personalizado para hoy, y realmente ayudó en esos esfuerzos largos.”

La combinación de una preparación meticulosa, un equipamiento adaptado y la capacidad de mantener la calma en condiciones extremas marcaron la diferencia. Mientras otros corredores se vaciaban y quedaban rezagados, Healy consiguió mantenerse cerca de Evenepoel y de Skjelmose, resistiendo hasta el final.

Cuando cruzó la línea de meta y subió al podio, el irlandés no pudo evitar dejarse llevar por la emoción. “Tadej es uno de los mayores deportistas que he visto, y Remco no está muy detrás de él. Estar en el podio con ambos es simplemente una locura. Es un momento que nunca olvidaré.”

Sin embargo, incluso en medio de la celebración, Healy mantuvo los pies en la tierra. Consciente de que los dos primeros le aventajaron en un par de minutos, lo interpretó no como un límite, sino como una nueva fuente de motivación: “Aún estoy un par de minutos detrás de ellos, así que tomaremos esto como motivación y seguiremos trabajando duro.”