Siguen cayendo como moscas por enfermedad en el Giro de Italia: os contamos la última baja

Ciclismo
domingo, 19 mayo 2024 en 9:49
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El Giro de Italia sigue siendo implacable con los corredores, y las enfermedades continúan mermando las filas de los equipos participantes. El último afectado por esta oleada de problemas de salud ha sido el Astana Qazaqstan Team, que ha perdido a uno de sus ciclistas clave, Vadim Pronskiy.
Hace tan solo unos días, el equipo Visma - Lease a Bike también se vio golpeado por problemas de salud, perdiendo a sus líderes Cian Uijtdebroeks y Olav Kooij. Ahora, el Astana Qazaqstan Team ha confirmado a través de sus redes sociales que Vadim Pronskiy no podrá continuar en la competencia debido a una enfermedad.
"Vadim Pronskiy se ha puesto enfermo y no podrá seguir compitiendo en el Giro de Italia", anunció el equipo en un comunicado oficial. El ciclista kazajo, de 25 años, había llegado al Giro con el objetivo de trabajar en favor de Alexey Lutsenko. Sin embargo, desde que su líder abandonó la carrera antes de la novena etapa, Pronskiy se ha limitado a rodar con el pelotón sin lograr actuaciones destacables.
En su última participación, Pronskiy ocupó el puesto 94º en la contrarreloj individual de la 14ª etapa, terminando a 5:26 del ganador de la etapa, Filippo Ganna. Antes de su abandono, se encontraba en el puesto 56º de la clasificación general, con más de una hora de desventaja respecto al líder.
El caso de Pronskiy subraya las dificultades y los desafíos que enfrentan los ciclistas en el Giro de Italia, donde no solo la exigencia física y mental, sino también las condiciones de salud, juegan un papel crucial. La retirada de Pronskiy es un golpe significativo para el Astana Qazaqstan Team, que ahora deberá reconfigurar sus estrategias sin uno de sus valiosos gregarios.
La salud de los corredores se ha convertido en un factor determinante en esta edición del Giro, y las sucesivas bajas por enfermedad reflejan la dureza de la competición. Los equipos y aficionados siguen atentos a cada desarrollo, con la esperanza de que las próximas etapas puedan disputarse con la menor cantidad de incidentes posibles.
En este contexto, el rendimiento de los ciclistas que continúan en carrera cobra aún más valor, destacando la resiliencia y el espíritu competitivo que caracteriza al mundo del ciclismo profesional. Mientras el Giro avanza hacia su recta final, la lucha por la maglia rosa sigue siendo feroz, pero no sin un alto costo para muchos de sus participantes.