El
Giro de Italia 2023 será una especie de montaña rusa para la estrella del
UAE Team Emirates,
Jay Vine. Sus numerosas caídas se han visto compensadas por un brillante trabajo en la montaña que ha ayudado a su compañero Joao Almeida a subir al podio. Sin embargo, Vine se conforma con ver el final de la carrera.
"Al principio del Giro, había marcado esta etapa como potencialmente emocionante para mí, pero tres semanas después de una Gran Vuelta muy dura, me desperté esta mañana mirando el recorrido, no con emoción, sino con miedo", reveló el australiano en un post en su cuenta oficial de Facebook. "Después de un largo traslado y varias etapas duras intentando ayudar a Joao en lo que podía, mi cuerpo ha estado luchando. (Seamos sinceros, si yo fuera un coche, mi salpicadero estaría iluminado como un árbol de Navidad). Sabía que era poco probable que fuera un contendiente para el día, pero esperaba que las piernas aguantaran otros 18,5 kms".
Sin embargo, una impresionante actuación en el Monte Lussari permitió a Vine terminar la etapa en 10ª posición. "Para mi sorpresa, mis piernas funcionaron bien durante la primera mitad del TT, clavé mis trazadas y mantuve un buen ritmo, sólo hasta que empezaron a fallar en la subida", dice. "No estaba llegando a los números que me habían marcado, pero en ese momento pensé: 'Bueno, he llegado hasta aquí, ahora no puedo parar'".
"El público y ver las banderas australianas han hecho que el día de hoy fuera muy especial. Me alegro de haber aguantado, ha sido una lucha sin cuartel, pero quería hacer que los colores nacionales se sintieran orgullosos y esforzarme al máximo por última vez antes de que el Giro llegue a su fin mañana", prosigue Vine, cuya atención pasará a centrarse en ayudar a Pascal Ackerman a intentar hacerse con la victoria en Roma. "Sólo queda una etapa, ¡y es otra oportunidad para los chicos rápidos! A ver qué podemos hacer".